La muñeca que Eva Fernández le ha entregado al Papa para recordarle que en el Congo le están esperando

Esta vez el regalo que nuestra corresponsal de COPE en el Vaticano, Eva Fernández, ha entregado al Papa en el vuelo a Baréin ha sido de un carácter entrañable, social y de esperanza. Aparentemente, una muñeca. Pero es algo más. Es un deseo grande de que el Papa vaya al Congo y Sudán del Sur como este miércoles el Papa él mismo anunció. Esta muñeca la han hecho enfermos mentales recogidos de la calle de Kinshasa por las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón para recordarle al Papa que en el Congo le están esperando.

Es el Centro Telema de Kinshasa, que realmente es un lugar de esperanza para los enfermos mentales de la capital congoleña. Por sus calles pueden verse a numerosas personas sin rumbo, solas, sin ropas, despeinadas, viviendo de la caridad… ¿Quién puede hacerse cargo de estas situaciones? Las familias son incapaces y el Estado no asume su responsabilidad. De ahí que las enfermedades mentales se agudicen.

Según la Organización Mundial de la Salud (OMS), más del 10 % de los africanos sufre algún tipo de trastorno mental y el presupuesto que los países destinan a combatir este tipo de patologías es casi inexistente. Si la OMS cree que es recomendable un psiquiatra por cada 5.000 habitantes, en muchos países de África solo hay uno por cada 100.000.

"Levántate"

Ante esta situación, las Hermanas Hospitalarias del Sagrado Corazón fundaron el Centro Telema, que en la lengua vernácula significa “levántate”. Fue en 1989 cuando llegaron a Kinshasa urgidas por una solución para los enfermos mentales que deambulaban por las calles. En 1991 se inauguraba este centro, que ya se ha quedado pequeño: al año se realizan más de 50.000 consultas y en 2020 hubo 4.000 nuevos pacientes.