El Papa elogia la aportación de Pell a la reforma económica del Vaticano: "Siguió al Señor con perseverancia"
En el telegrama de pésame enviado al colegio cardenalicio el Santo Padre ha recordado el testimonio "coherente y comprometido" del cardenal australiano recién fallecido
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El Papa Francisco ha elogiado la aportación "con determinación y sabiduría" del cardenal australiano George Pell, fallecido este martes a los 81 años, a la reforma económica implementada en el Vaticano, en el telegrama de pésame enviado al colegio cardenalicio. Pell, quien fue condenado en 2018 y pasó más de 400 días en prisión para después ser absuelto de abusar sexualmente de dos menores en la década de los noventa, falleció en una clínica en Roma por complicaciones tras una operación para sustituir la prótesis de la cadera.
El cardenal australiano había sido elegido para formar parte del C9, el consejo de cardenales llamado a ayudar al Papa Francisco en su gobierno, y posteriormente fue prefecto de la Secretaría de Economía, el nuevo "ministerio" de Finanzas para dar transparencia y poner orden en las cuentas de la Santa Sede.
"Deseo expresar a usted y a todo el colegio cardenalicio, y en modo especial a su hermano David y otros familiares, mi cercanía. Expreso mis más sentidas condolencias, recordando con gratitud su testimonio coherente y comprometido y su dedicación al Evangelio y a la Iglesia", ha expresado Francisco en el telegrama enviado al decano del colegio cardenalicio, Giovanni Battista Re.
En el mensaje, el Papa ha destacado "la diligente colaboración prestada a la Santa Sede en el ámbito de la reciente reforma económica de la que puso las bases con determinación y sabiduría".
Francisco ha pedido oraciones para "este fiel siervo que, sin vacilar, ha seguido al Señor con perseverancia también en la hora de la prueba" y ha enviado su bendición a todos los que comparten el dolor por el fallecimiento del purpurado.
Pell - que sufría desde hace tiempo problemas cardíacos y tenía implantado un marcapasos desde 2010 - se encontraba en Roma, adonde había regresado en septiembre de 2020, dos años después de someterse a un juicio en Australia por acusaciones de abusos sexuales a menores en la década de los 90 y tras el que fue encarcelado durante 404 días, antes de su definitiva absolución.
Nacido en Ballarat, Victoria, en 1941, arzobispo emérito de Sídney y luego de Melbourne, el cardenal había sido llamado por el papa Francisco el 13 de abril de 2013 a formar parte del Consejo de Cardenales para estudiar un proyecto de reforma y ayudarle en el gobierno de la Iglesia. El 24 de febrero de 2014 había sido nombrado prefecto de la recién creada Secretaría de Economía, iniciando una serie de reformas financieras. Había dejado los dos puestos en diciembre de 2018 y febrero de 2019, respectivamente.
De vuelta a Roma, Francisco recibió a Pell en audiencia y le agradeció su "testimonio" mientras que en la entrevista emitida en el periodo navideño por el canal televisivo italiano Mediaset, el pontífice tachó de "calumnias" las denuncias de abusos en Australia y dijo que era "un gran hombre y le debemos mucho".