El Papa exige la liberación sin condiciones de los secuestrados en Colombia: "Paz y reconciliación"
El Santo Padre, en los tradicionales saludos tras el Ángelus, ha asegurado sus oraciones por los habitantes de la República Democrática del Congo, afectados por las inundaciones
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En los tradicionales saludos después del rezo del Ángelus, el Papa Francisco ha recordado el bautizo esta mañana de 16 niños y niñas en la Capilla Sixtina y ha pedido rezar “por ellos y por sus familias”: “Extiendo esta oración por todos los niños que reciben el santo Bautismo en estos días”.
Asimismo, el Santo Padre ha recordado que las comunidades eclesiales de Oriente que siguen el calendario juliano celebran este domingo, 7 de enero, la Santa Navidad: “Con espíritu de gozosa fraternidad, deseo que el nacimiento del Señor Jesús nos llene de luz, caridad y paz”.
La oración "por la liberación incondicional de los secuestrados en Colombia"
El Santo Padre también ha pedido unirse a su oración “por la liberación incondicional de todos los secuestrados actualmente en Colombia. Este gesto, que es un deber ante Dios, favorecerá también un clima de reconciliación y de paz en el país”.
“Estoy muy cerca de la población de la República Democrática del Congo, afectada por las inundaciones de los últimos días. Y, por favor, seguid rezando por la paz en Ucrania, Palestina, Israel y en el mundo entero”.
Conocer la fecha de nuestro bautizo
Recordando la fiesta del Bautismo de Jesús que tuvo lugar en el río Jordán, el Santo Padre ha subrayado como todo el pueblo “acude a bautizarse con humildad, con sinceridad”: “Jesús también va, inaugurando su ministerio: de este modo, muestra que quiere estar cerca de los pecadores, que ha venido por ellos, por nosotros, ¡por todos nosotros!”.
Como ya ha pedido otras veces en estas fechas, Francisco ha remarcado que es importante “conocer el día de nuestro bautismo y festejarlo”: “Comprometámonos a buscar y recordar la fecha de nuestro bautismo; y demos gracias hoy al Señor porque desde entonces Él no solo está con nosotros, sino en nosotros. Démosle gracias también por nuestros padres, que nos llevaron a la pila bautismal, por quien nos administró el sacramento, por el padrino y la madrina, por la comunidad en la que lo recibimos”.