El Papa Francisco, en la Audiencia General: "Es Cristo con su gracia quien nos hace justos"

En su reflexión sobre la carta de san Pablo a los Gálatas, el Papa Francisco ha impartido una catequesis a los fieles congregados en el Aula Pablo VI sobre la justificación. En este sentido, ha explicado que "no somos nosotros con nuestros esfuerzos que nos volvemos justos, sino que es Cristo con su gracia quien nos hace justos".

El Santo Padre ha explicado que esta justificación a través de Jesús "nos introduce en la larga historia de la salvación, que muestra la justicia de Dios: frente a nuestras continuas caídas y a nuestras insuficiencias, Él no se ha resignado, sino que ha querido hacernos justos y lo ha hecho por gracia, a través del don de Jesucristo, de su muerte y resurrección".

Al reflexionar sobre el sentido del término "justificación", el Pontífice expresó que "en el conjunto del pensamiento de San Pablo se puede decir sencillamente que la justificación es la consecuencia de la «iniciativa misericordiosa de Dios que otorga el perdón» (Catecismo de la Iglesia Católica, n. 1990)". En este sentido, puso de manifiesto que Dios, "a través de la muerte de Jesús, ha destruido el pecado y nos ha donado de forma definitiva el perdón y la salvación".

De este modo, el Papa explica la misericordia que se da a través de Cristo, por la que se produce "un regreso a la relación original entre el Creador y la criatura, antes de que interviniera la desobediencia del pecado". No obstante, ha remarcado que esto no ocurre por el propio esfuerza, sino que se produce en aquel que ha sido "conquistado por Cristo".

San Pablo, ejemplo de la justificación de Dios a la humanidad

El Santo Padre ha propuesto a los fieles el ejemplo de san Pablo para entender y acogerse a la misericordia de Dios, ya que el apóstol "tiene siempre presente su encuentro con Jesús resucitado en el camino de Damasco; y para llegar a un conocimiento pleno del misterio de Cristo, está dispuesto a renunciar a todo lo que antes presumía, porque ha descubierto que sólo la gracia de Dios le ha salvado".

Viendo de esta manera el don que ha recibido cada persona,

La fuerza de la gracia debe combinarse con las obras de misericordia que estamos llamados a vivir para dar testimonio de lo grande que es el amor de Dios".

Al final de la catequesis, Francisco expresó su tristeza y preocupación por la situación que vive Nigeria actualmente, tras el ataque de bandas criminales contra varias aldeas de la región de Kaura, al norte del país: "Rezo por los que murieron, por los que resultaron heridos y por toda la población nigeriana. Espero que la seguridad de todos los ciudadanos del país esté siempre garantizada".