El Papa mantiene una audiencia privada con el número dos de la Iglesia Ortodoxa Rusa

El papa Francisco ha recibido este jueves en audiencia al responsable de la diplomacia del Patriarcado de Moscú, el metropolita Antonij de Volokolamsk. No han trascendido los motivos del encuentro. De hecho, el encuentro ha sido anunciado posteriormente, este viernes. Antonij es, oficialmente, el presidente del departamento de Relaciones Exteriores desde 2022. Un puesto de gran poder, pues es la segunda autoridad del patriarcado.

No es la primera vez que se encuentra con el Papa Francisco, ya lo hizo en agosto de 2022. Entonces fue una visita anunciada y fotografiada.

Francisco no olvida a la ''martirizada Ucrania''

Meses después, en octubre, este mismo metropolita anunció que las relaciones entre el Vaticano y el patriarcado moscovita estaban congeladas. No sobran motivos, pues el patriarca ortodoxo ruso, Kirill (Cirilo), que lleva al frente desde 2009, ha apoyado la invasión de Ucrania desde el principio en febrero de 2022. Siempre ha justificado la guerra como la defensa de Rusia ante la invasión de los valores de Occidente.

Una guerra que el Papa sigue con atención y no deja de recordar en sus audiencias citando continuamente a la ''martirizada Ucrania''.

Sin embargo, en la primavera de 2023, Francisco volvió a saludar a Antonij tras la audiencia del 3 de mayo. Su homólogo vaticano, Pietro Parolin, justificó entonces su presencia como "comunicaciones normales" entre ambas iglesias, ortodoxa y católica.

Kirill, un posible punto de negociaciones diplomáticas

Un mes después de este encuentro, en junio de 2023, Francisco encargó al cardenal Matteo Zuppi una misión diplomática para buscar una mediación que allanara el camino a la paz. Zuppi es el arzobispo de Bolonia y miembro del Dicasterio para las Iglesias Orientales. También ha sido enviado en nombre del Papa a Kiev, Washington y Pekin en misiones diplomáticas.

El Papa se reunió por primera vez con el patriarca ruso en La Habana en febrero de 2016. Benedicto XVI y san Juan Pablo II también mantuvieron reuniones con los patriarcas de Moscú. A pesar de la guerra, la Santa Sede no ha condenado ni a Putin ni al patriarca Kirill, pues este último puede ser un puente de negociación y diplomacia.