La carta de la monja secuestrada, Gloria Narváez: "Espero que Dios me ayude a recuperar mi libertad"
La misiva ha llegado a manos del hermano de la religiosa, Edgar Narváez, gracias a Cruz Roja Internacional. Gloria declara estar secuestrada por un grupo afín a Al Qaeda
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Gloria Cecilia Narváez Argoti es una monja de origen colombiano que fue secuestrada en Karangasso (Mali) en 2017. Desde entonces, han pasado cuatro años en los que nadie ha podido conocer el paradero de la monja, que actualmente se encuentra rehén de los terroristas.
Sin embargo, Cruz Roja Internacional ha podido hacer llegar una carta de Gloria Narváez a su hermano, Edgar: "Envío mis más cordiales saludos a todos. Que el buen Dios los bendiga y les conceda salud. He estado presa durante cuatro años, y ahora estoy con un nuevo grupo", son las primeras palabras de la misiva.
Ayuda a la Iglesia Necesitada ha podido acceder al texto del mensaje, fechada el 3 de febrero de 2021. Según relata la religiosa franciscana, se encuentra actualmente secuestrada por el grupo GSIM (Grupo de Apoyo al Islam y a los Musulmanes), un comando terrorista del Sahel vinculado a Al Qaeda.
La carta termina con una petición de la hermana Gloria: "Que todos recen mucho por mí. Que Dios los bendiga a todos. Espero que Dios me ayude a recuperar mi libertad. Tu cariñosa hermana, Gloria"
Edgar ha enviado anteriormente otras cartas durante el tiempo del secuestro. En una de ellas le informaba del fallecimiento de su madre a los 87 años de edad. Otra noticia que, según relata Edgar, emocionó a su hermana fue la liberación de su compañera de secuestro, la trabajadora humanitaria y doctora francesa de 75 años Sophie Petronin, cautiva de los terroristas hasta el 8 de octubre de 2020.
El estado de salud de Gloria Narváez
La congregación ha hecho múltiples esfuerzos por lograr la liberación de la hermana Gloria desde que fuera secuestrada en 2017, hasta ahora sin éxito.
Al poco tiempo de ser liberada, Petronin advirtió en 2017 del severo deterioro que estaba sufriendo la religiosa a nivel físico, llegando a pedir al presidente de Francia, Emmanuel Macron, que interviniera en el caso: "Su espíritu está cediendo, tenemos que hacer todo lo posible para sacarla de allí". También relata cómo ella y la hermana Gloria compartían toda su vivencia y objetos allí, incluyendo mantas, comida y agua.
La hermana Noemí, ex superior General de la congregación, relató hace algunos meses el momento en que sor Gloria fue secuestrada: "Cuando los secuestradores detuvieron a una de las hermanas de la comunidad, ella salió de su escondite y les dijo: "Soy la mayor, la responsable, déjenla ir". Entonces los secuestradores liberaron a la monja y se llevaron a la hermana Gloria".