El Papa y Twitter, por Federico Lombardi, portavoz de la Santa Sede

El Papa y Twitter, por Federico Lombardi, portavoz de la Santa Sede

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

El nuevo tuiteador apareció en el continente digital para tuitear. Algunos habitantes de ese continente dijeron: "¿Que hace aquí este intruso? ¡En este campo solo nosotros sabemos qué cosa y cómo se debe tuitear!". Y se burlaron de él y le dieron la espalda. Otros habitantes del continente digital dijeron: "¡Interesante! Veamos si tendrá más seguidores que otros personajes famosos, actores o futbolistas". E hicieron sus apreciaciones sobre las cifras, pero no pensaron qué cosa decían los tuits y luego perdieron un poco el interés.

Otros dijeron: "Bien. Hay alguien que se preocupa en decirnos cosas que considera importantes para cada uno de nosotros. Estaremos pendientes para ver y escuchar, y estaremos contentos de retuitearlas a nuestros amigos que se encuentran en búsqueda como nosotros". Y los tuits dieron fruto y se multiplicaron, por treinta, por sesenta, por cien? Quien tiene oídos para escuchar, que escuche.

140 caracteres ? cuantos contiene un tweet ? no son pocos. La mayor parte de los versículos del Evangelio tiene menos; las bienaventuranzas son mucho mas breves. Un poco de concisión no hace mal. Desde hace siglos sabemos que escuchar una palabra de Jesús por la mañana y llevarla en la mente y en el corazón sostiene el camino de una jornada? o de una vida.

Pero es necesario entender por qué esta palabra es importante, de donde viene y a donde va, en cual contexto de la vida encuentra su sentido. En resumen, el tweet no lleva vida por si mismo o automáticamente. No puede encontrar por si solo una acogida entusiasta o un rechazo. La semilla puede caer en un terreno pedregoso o en medio de las zarzas de los prejuicios y sofocar, o caer también en un terreno bueno y disponible y así dar fruto y multiplicarse.

Naturalmente el mundo no se salvará a ritmo de tweets, pero sobre el millar de bautizados católicos y sobre los siete mil millones de habitantes del mundo, algunos millones de personas podrán también por este medio sentir al Papa más cerca, sentirlo decirles una palabra, darles una chispa de sabiduría para llevar en la mente y en el corazón, también para compartir con los demás amigos del tweet. Una nueva forma de servicio al Evangelio.

(RC-RV)