Virgen del Mar; el enigma de su hallazgo y su misteriosa ubicación en Santander
La fiesta de la patrona de Santander se celebra siempre el Lunes de Pentecostés, de ahí que cada año varíe en el calendario
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Mayo es el mes de María. Y en cope.es lo recordamos cada día contándote la historia de cada una de las Vírgenes de nuestro país y animándote a rezar con ella. En esta ocasión nos acercamos a la Virgen del Mar, patrona de Santander.
Cuenta la tradición que la pequeña imagen de la Virgen de Nuestra Señora del Mar apareció flotando en el mar, sobre unas tablas y entre las rocas. Quizás fuera el resto de un naufragio o la "Virgen de galeón", una de esas imágenes que navegaban sujetas por un vástago al barco.
Foto: Antonio Arribas
ORIGEN INCIERTO
Se sabe que se le empezó a rendir culto allá por el 1315, que ya en el 1400 Gonzalo Fernández de Pámanes, que pertenecía a uno de los seis linajes primitivos de Santander, fundó su ermita, en cuyo interior permace hoy en día su sepulcro.
Ermita Virgen del Mar
Se dice que su ubicación, en la isla de la Virgen del Mar, en San Román de la Llanilla (Santander) no fue la deseada en un primer momento. Los vecinos eligieron por aquel entonces Rostrío, no muy lejos de la actual ermita, pero sí más alejada de la costa.
Pero algo sucedió que hizo cambiar a todos de parecer; los materiales acopiados durante el día, eran misteriosamente devueltos durante la noche al lugar donde había aparecido la imagen, en la isla solitaria en la que finalmente fue edificada. Justo al lado del mar.
Una situación sin duda privilegiada pero a merded de los temporales que han llevado a su derribo parcial durante no pocos azotes de mar, quizás uno de los peores, a finales del siglo XVII.
AUDIO: Francisco Hoyo, párroco de San Román de la Llanilla
Sería ya en 1979 cuando la Señora fue proclamada oficialmente patrona de Santander por el entonces Obispo, Monseñor Juan Antonio del Val. Alegría que se consumó en 2005 cuando los devotos veían cumplido uno de sus deseos; su Coronación canónica, a manos de Monseñor José Vilaplana.
LUNES DE PENTECOSTÉS
La fiesta de la Virgen del Mar se celebra siempre el Lunes de Pascua de Pentecostés, de ahí que cada año varíe en el calendario, en función de cuando termine la Semana Santa.
TALLA GÓTICA
La Virgen es una maravillosa talla gótica de finales del XIII, que conserva la tradición iconoclasta del período románico.
Lejos de la inmensidad del Mar que la da nombre, su imagen es pequeña, muy proporcionada, de apenas 55 centímetros de altura, sedente en un sitial bajo y con el Niño sobre sus rodillas.
Foto: Antonio Arribas
MATERNAL PROTECCIÓN A SANTANDER
Según explica la Diócesis de Santander, "popularmente, y desde hace siglos, la imagen de la Virgen del Mar ha ejercido un extraordinario influjo en la ciudad de Santander". A su presencia "acudían tripulaciones de barcos, tras las angustias sufridas en el mar. Y durante las terribles pestes que asolaron a Santander a partir del siglo XVI, queda documentada la bajada de la imagen a la villa y estancia en ella para solicitar su maternal protección contra la enfermedad".
Foto: Antonio Arribas
En 1.590 la Virgen fue robada por unos piratas, con la mala suerte de que su nave naufragó al poco frente a Castro Urdiales. De nuevo su imagen se encontró flotando en el mar y fue llevada hasta Santander, escoltada por sus fieles en procesión.
HERMANDAD
Desde el año 1994 hay constituida una Hermandad, con sede en San Román de la Llanilla, heredera de su antecesora de 1.489, que "pretende ser un instrumento que ayude a mantener viva la devoción y la tradición de la Virgen del Mar".
HIMNO ANTIGUO DE LA VIRGEN DEL MAR
A continuación puedes escuchar el himno antiguo a la Virgen del Mar, cantado por el sacerdote Francisco Lledías Juntádez
Foto: Antonio Arribas
ORACIÓN DE LA VIRGEN DEL MAR:
¡VIRGEN DEL MAR!
Señora y protectora nuestra
desde tiempo inmemorial
tus hijos de Santander acudimos a ti
para expresarte nuestro afecto
y solicitar tu ayuda
Hoy también lo hacemos con esta súplica:
haznos fuertes en la fe
para ser testigos de tu Hijo
Alienta nuestra esperanza
en los avatares de la vida
Mantén el fuego del amor
en nuestros corazones
para hacer visible la nueva humanidad
del Reino de Dios.
Y, en todo momento,
mientras cruzamos el mar de la vida,
ruega por nosotros,
Santa Madre de Dios,
para que seamos dignos de alcanzar
las promesas de Jesucristo,
Nuestro Señor. Amén.