Abre al público en Roma el Palacio Apostólico de Letrán: aquí vivieron los papas durante mil años

A mitad de diciembre se abrió en Roma al público, por primera vez, el Palacio Apostólico de Letrán, la casa del obispo de Roma donde los papas vivieron desde el siglo IV al XIV. Se encuentra situado junto a la basílica de San Juan de Letrán y el edificio fue restaurado en el siglo XVI bajo el pontificado de Sixto V que decidió convertirlo en su residencia de verano.

Hasta hoy el Palacio Lateranense solamente se abría ocasionalmente, por lo que se trata de una novedad absoluta deseada por el mismo Papa Francisco, quien sugirió abrir al público la que, durante muchos siglos, fue la residencia de los papas, antes de ser trasladada al Vaticano. Actualmente este edificio acoge las oficinas de la diócesis de Roma.

La historia del Palacio Lateranense

Este palacio tiene una historia muy antigua ya que comienza en el año 312, día de la batalla de Ponte Milvio, durante la cual los ejércitos de Constantino derrotaron a los de Majencio. Según cuenta la tradición cristiana, Constantino, como signo de gratitud a Cristo, le dio al Papa Melquíades las tierras que una vez pertenecieron a la noble familia de Letrán y que durante algunos años habían sido propiedad de Constantino. El emperador además concedió un permiso para construir un edificio sagrado en el área, la futura basílica de San Juan de Letrán que fue consagrada en el año 318.

Los papas trasladaron su residencia precisamente en estos edificios, aunque luego este complejo fue dañado y saqueado a lo largo de los siglos. El Palacio Lateranense fue abandonado al regreso de los papas de Francia cuando designaron el Vaticano como el lugar elegido para vivir, no solamente por los aspectos geográficos (la zona era más segura), sino sobre todo en virtud de la presencia de la tumba de Pedro. A pesar de esto, el Palacio Lateranense siguió manteniendo intacto su valor espiritual: todos los papas, de hecho, una vez elegidos al trono papal, habrían tomado posesión de ellos en la basílica de San Juan.

Las visitas guiadas con las Hermanas Misioneras de la Divina Revelación

El actual Palacio Lateranense que ya se puede visitar se debe a las operaciones de remodelación urbanística impulsadas por el Papa Sixto V. Los visitantes podrán visitar diez salas, el apartamento papal, la capilla privada, la escalera monumental que conduce directamente a la basílica de San Juan de Letrán. Y ver, por supuesto, la 'Sala de los Pontífices' donde se firmaron los Pactos de Letrán entre la Santa Sede y Italia en 1929 en el que se estableció la Santa Sede como país soberano.

Será posible acceder al Palacio Lateranense solamente con visitas guiadas, en grupos de hasta 30 personas, acompañados por las Hermanas Misioneras de la Divina Revelación, que desde hace años ofrecen itinerarios de arte y fe en Roma.