La pregunta que queda en el aire tras la marcha del Gran Poder de Sevilla de Los Pajaritos: ¿Y ahora qué?
El Hermano Mayor se muestra satisfecho por que la imagen del Señor haya puesto en el foco los problemas del barrio, pero apunta que corresponde a las administraciones reaccionar
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Con su característica túnica morada y lisa hizo su entrada el Gran Poder a su Basílica de San Lorenzo tras tres semanas de peregrinación por las calles de Los Pajaritos, uno de los barrios con mayores índices de pobreza de Sevilla.
Miles de personas asistieron hasta la madrugada del domingo la procesión con la que el Señor de Sevilla regresaba a su templo, y con el que se culmina esta última Misión Evangelizadora, con la que la Hermandad del Gran Poder conmemora el 400 aniversario de la hechura de la imagen del Señor.
Uno de los momentos más emotivos de su recorrido al centro de la capital hispalense fue cuando, en una Campana atestada, la banda de cornetas y tambores de la Centuria Romana Macarena interpretó la marcha de 'Híspalis', entre otras marchas a Jesús del Gran Poder.
Las imágenes que ha dejado para la historia el Jesús nazareno por las calles de Tres Barrios sin infinitas. Tanto es así que, para muchos, marcará un antes y un después en la función social y evangelizadora de las hermandades, tan arraigadas a la cultura sevillana.
“Estamos muy satisfechos porque han sido días importantes para la Iglesia, para la hermandad, para los devotos del Señor, y por la dimensión evangelizadora que hemos alcanzado en muchas almas que estaban despegadas del Señor”, asegura en Aleluya Ignacio Soro, Hermano Mayor de la Hermandad del Gran Poder.
Soro apunta que su hermandad no ha tenido la intención de ser la primera en realizar esta misión evangelizadora en la calle para colgarse medallas, si no que lo han realizado por su proyecto evangelizador: “En el siglo XXI debemos mirar hacia fuera, las hermandades tienen que mirar hacia afuera y ver las necesidades de cada barrio de Sevilla y en general de toda España, porque todos en los barrios hay zonas más castigadas”.
A lo largo de estas tres semanas, Ignacio Soro ha destacado la cercanía que ha percibido por parte de los vecinos de Los Pajaritos, sobre todo entre la gente mayor: “Han podido estar cerca del Señor personas que, por problemas de movilidad no pueden presenciar la imagen de manera directa, y estas semanas han podido verlo. Nos hemos familiarizado con ellos. El barrio tiene ahora más alegría y es muy gratificante”.
En cualquier caso, el Hermano Mayor del Gran Poder advierte que el paso del Jesús Nazareno por Tres Barrios no puede arreglar los problemas de vivienda o desempleo que padece Los Pajaritos, por lo que insta a las administraciones a tomar nota y poner el foco en sus vecinos, tan castigados por la pobreza.
“Nosotros podemos contribuir, pero las administraciones tienen que tomar las riendas. Son barrios iguales de dignos, y tienen que ponen sus miras en ellos para fomentar el empleo, la formación de los niños... Esto ha servido para que Tres Barrios sea un escaparate y se vean necesidades de estos barrios para tomar buena nota”, precisa Soro.