San Juan XXIII, promotor del Concilio Vaticano II

Cristo en el Evangelio da gracias al Padre del Cielo porque estas cosas se las ha revelado a los sencillos. Esto le sucedió al Papa San Juan XXIII cuya festividad celebramos hoy. Giuseppe Angelo Roncalli nace en Soto il Monte (Italia) en 1881. De familia muy humilde y cristiana ingresa el Seminario gracias a que un tío suyo le costea los estudios. Una vez ordenado sacerdote en 1921 se pone a trabajar al servicio de la Santa Sede.

Tras estudiar Derecho Canónico y el buen trabajo que realiza en la Obra Pontificia “Propaganda Fide”, es consagrado Obispo y enviado a Bulgaria. Allí tiene que unir a los católicos y los ortodoxos que tienen grandes diferencias. Las incomprensiones le llevaron a salir del país. No faltaron dificultades en sus siguientes destinos como fueron Turquía donde tuvo que hacer frente al totalitarismo nazi y salvar a muchos judíos de los campos de concentración. E

Enviado de Nuncio a París, culminó su trayectoria como Patriarca de Venecia. Creado Cardenal por Pío XII, a la muerte de este Pontífice participará en el Cónclave. Allí es elegido Papa tomado el nombre de Juan XXIII. Muchos lo han querido elegir como un “Pontífice de transición”. Sin embargo, su acercamiento a los hombres de forma espiritual y pastoral le hace ser un Pastor muy evangélico. Gran devoto de la Virgen, convoca el Sínodo de Roma y el Concilio Vaticano II.

Este evento supondrá la apertura de la Iglesia al hombre moderno sin diluir nada del Mensaje del Evangelio ni de la Tradición. También acercará posturas entre el bloque occidental y la URSS dando algunos pasos para buscar la paz. Esa será su Encíclica más destacada “Pacem in Terris”, además de otros escritos espirituales y vinculados a la Doctrina Social de la Iglesia. San Juan XXIII muere en 1963. Se fija hoy como su festividad porque esta jornada se inauguró el Concilio Vaticano II.