Santa Josefina Bakhita: esclava liberada por Cristo y servidora de los pobres

La liberación como muestra el Señor en la Escritura a través de San Pablo es que como Cristo ha Resucitado ya no puede haber distinción entre hombre o mujer, judío o griego, esclavo o libre porque todos hemos sido liberados y todos somos uno en el Resucitado. Este es el Patronazgo de la Santa de este día, Josefina Bakhita. Nacida en Sudán hacia el año 1869, procede una zona asolada por el comercio de esclavos. De hecho se hablaba de este tema entre aquellos poblados africanos y la verdad, es que impresionaba. 

Pero no se imaginaba que ella iba a ser una de esas esclavizadas y liberadas por el amor de Dios. La historia se centra en un día, a los siete años cuando va con una amiga dos hombres se acercan pidiéndole que les coja algunas frutas del bosque. Cuando se separan ambas amigas ellos la retienen y capturan. Así empieza su cautiverio pasando de amo en amo. Malos tratos y curación a lo vivo con brutalidad poniéndole sal sobre las heridas que le causaban.

Sin embargo quiso Dios que el último que le compra es un diplomático italiano. Su Fe le hace comprara a quella esclacva para librarle de su captores y darle la libertad. Cuando éste vuelve a Italia, Josefina le acompaña. Allí conocerá a las Hermanas de la Caridad también llamadas canosianas por su fundadora Santa Magdalena de Canossa. Gracias a ellas se bautiza y entra en ese Instituto. Tras una vida entregada a los necesitados por Cristo, como prescribe el carisma canosiano,

Santa Josefina Bakhita muere en 1947. Ella se equipara a José en Egipto y ve providencialmente su calvario ya que como Dios escribe recto con renglones torcidos su venida a Europa le dio la libertad y le hizo conocer a Cristo. Coinciendo con esta fecha se celebra la Jornada de Oración y reflexión contra la trata.