Santa Josefina Bakhita
Hoy también, coincidiendo con esta celebración de Santa Josefina Bakhita, el Papa Francisco estableció la Jornada de Oración y Reflexión contra la Trata de personas
Madrid - Publicado el
1 min lectura
Dios siempre se presernta en el Evangelio como el Libertador de nusstros pecados, raíz de todo tipo de esclavitudes. Hoy hacemos memoria de Santa Josefina Bakhita. Su nombre significa "afortunada". Su nacimiento en 1869 en Sudán tuvo lugar en el seno de una tribu en esa zona. Pronto oyó hablar de los colonos que apresaron a mucha gente para venderles como esclavos. Así le sucedió a una hermana suya.
Olvidado este episodio, ella misma cuenta cómo a la edad de 9 años cuando caminaba con su hermana en el bosque, aparecieron dos hombres extraños y bien parecidos que invitaron a su amiga a buscarles unas frutas y que serían bien recompensadas ambas amigas. Una vez aisladas, Josefina sintió cómo la forzaban con un cuchillo vendiéndola a varios amos sucesivamente donde, con algunos de ellos, sufrió especiales torturas y malos tratos.
Una vez con el último de esos cinco dueños tuvo especial deferencia hacia ella, devolviéndole la libertad. Esto sucedió cuando ella vivía en Italia, con este amo más benevolente al que había acompañado para servirle. Allí conoció a las Canosianas, un Instituto fundado por Santa Magdalena Canossa, y cuyo carisma se dedicaba a la educación, la caridad y la ayuda humanitaria. Así tuvo ocasión de abrazar la Fe en el Señor Jesús al que reconoció como su Libertador.
Aunque pudo haber regresado a su tierra decidió quedarse en Italia. Antes de morir en 1947 señaló que perdonaba a sus captores y añadió que, es más, le hubiese gustado haberles vuelto a ver para besarles las manos, ya que gracias a ellos abrazó la Fe. Hoy también, coincidiendo con esta celebración de Santa Josefina Bakhita, el Papa Francisco estableció la Jornada de Oración y Reflexión contra la Trata de personas.