Santa Teresa de León

Natural de Portugal, en 1178, es hija del rey Sancho I

Santa Teresa de León

Jesús Luis Sacristán

Madrid - Publicado el

1 min lectura

Recuerda el Evangelio que hay que atesorar tesoros en el Cielo donde no hay polilla ni carcoma que se las coman. Esta invitación del Señor al desprendimiento, fue vivida por Santa Teresa de León cuya vida no hay que confundir con Santa Teresa de Jesús, la santa andariega. Natural de Portugal, en 1178, es hija del rey Sancho I.

Casada con uno de sus primos por orden del padre como se acostumbraba a hacer en aquellos tiempos, la Iglesia declaró nulo el matrimonio al no haber pedido la dispensa de consanguinidad. Hubo un tiempo en el que ella se sintió muy comprometida con el matrimonio y se negaba a aceptar la sentencia. Con el tiempo, que todo lo cura y tras muchas discusiones con el esposo, ambos aceptan la sentencia.

Ya libre de vínculo matrimonial ella llega a un Monasterio Benedictino de Monjes que se iban deteriorando ya que se habían relajado y no seguían la norma de San Benito “ora et labora”. La única opción que veía posible era quitar a los monjes. En su lugar estableció una comunidad de monjas cistercienses de la reformadas según la normativa de San Bernardo y San Roberto de Molesmes.

La idea era revitalizar la Fe en aquel lugar. Ella no asumió, de momento, el hábito, porque quería salir y entrar libremente del Monasterio con el fin de poder presentar este formato de vida a otras personas y, al tiempo, solventar los problemas familiares que se le presentasen. Cuando los resuelve, toma el hábito hasta 1250. Aunque fue beatificada, el fervor popular la incluye en los Santos.