El santo profeta que anunció en exclusiva las mejores noticias de la historia

Ezequiel es ese profeta del Antiguo Testamento que destaca la presencia de Dios en todo momento en el caminar de su Pueblo, dándoles pastores según el corazón del propio Señor. Por eso, Israel siempre estuvo bien acompañado espiritual y socialmente por muchos guías, jueces y profetas que mostraban a Dios más cercano de lo que el pueblo pensaba. Hoy lo vemos con la festividad del profeta Isaías. 

Forma parte de los llamados Profetas Mayores de la Sagrada Escritura junto a Jeremías, Ezequiel y Daniel. Su nacimiento se sitúa el año 765 a. C. y su libro del Antiguo Testamento es el más largo de todos los que figuran tanto en el Antiguo como en el Nuevo testamento. Su palabra recuerda a Israel que ha abandonado los caminos de Dios, pero siempre mantiene la esperanza.

“Festejad a Jerusalén y alegraos los que por ella llevasteis luto”. Son palabras que preludian la Salvación. El mismo Profeta alude a los Misterios de la Salvación cuando dice “Mirad la Virgen está encinta y dará a luz un Hijo al que le pondrá por nombre Enmanuel (que significa Dios-con-nosotros). Esto le da un papel especial en el Tiempo de Adviento por sus palabras siglos atrás cuando se presenta como la Voz que grita en el desierto “Preparad el camino al Señor, allanad sus senderos. Que lo torcido se enderece y lo escabroso de allane y todos verán la Salvación de Dios”, Esto se aplica a Juan Bautista cuando en el desierto pide la conversión ante la llegada del Mesías.

También tiene una parte muy especial en el momento de contemplar la Pasión del Señor, porque en alusión a la Redención menciona la Siervo de Yavé maltratado como un cordero manso llevado al matadero. Isaías muere mártir según cuenta la tradición por orden del monarca Manasés.