Santa Catalina de Siena
Uno de los sellos más característicos de su vida fue el impulso que dio para exhortar a los Pontífices a Roma en los duros momentos del Destierro de Avignón
Publicado el
2 min lectura
Dios dejó la impronta de su Misterio pascual en el corazón de sus discípulos para que extendiesen su Mensaje Salvador ayudando a los hombres a entrar por la senda de la rectitud. Hoy es Santa Catalina de Siena, a quien le tocó orientar a los Papas en este tiempo. Nace el año 1347 en Siena (Italia), heredando de su padre la caridad, la dulzura y la bondad, mientras que de su madre toma la decisión y la firmeza.
En su niñez tiene una fuerte experiencia sobrenatural de Dios, optando por la consagración al Señor, a pesar de que sus padres intenten buscarla esposo. Tras un tiempo de abandono de su vida espiritual, retorna al camino de la Fe. Pronto ingresará en las Hermanas de la Penitencia de Santo Domingo, que eran de la Tercera Orden Dominica. Desde este momento se acrecienta la vida interior con más ahínco, si cabe, que en momentos pasados. Esta profundidad se plasmó en sus escritos.
El santoral de hoy, jueves 29 de abril
Y tanto sus publicaciones como su vida, orientaron e influyeron en muchas personas de todos los estilos y clases. Uno de los sellos más característicos de su vida fue el impulso que dio para exhortar a los Pontífices a Roma en los duros momentos del Destierro de Avignón, algo en lo que insistió hasta que lo consiguió. También destacó por su contribución a la renovación de la vida religiosa, algo por lo que luchó hasta el final de sus días.
A pesar de que su vida humana se iba deteriorando, no cejó en pedir a Dios por la salvación del mundo y la revitalización de la Iglesia Universal. Muere muy prematuramente, en el año 1380. En su vivencia sobrenatural tuvo conversaciones con el Señor que le confió muchos secretos por los que iba a pasar la humanidad. Es Co-Patrona de Europa junto a San Benito de Nursia, Santa Brígida de Suecia, Santa Edith Sthein y los Santos eslavos Cirilo y Metodio.