El de la agresión sexual a una menor en Igualada, en Barcelona, en la noche de Halloween de 2021 es uno de los juicios más dramáticos de los últimos años. Una brutal, terrible agresión de la que hay que decir que la víctima, de 16 años, no recuerda nada. La paradoja es que, teniendo en cuenta la edad de la chica, "si hubiese ocurrido unos meses antes, podría enfrentarse a la prisión permanente revisable", según ha contado este lunes el abogado de la víctima, Jorge Albertini en 'El Cascabel' de TRECE.

La joven sufre secuelas físicas, psicológicas y riesgo de revictimización, y por esa razón el juez le ha permitido no declarar en el juicio. Por tanto, la joven no ha tenido que ver la cara de su presunto agresor. En cambio, se utilizará su declaración en fase de instrucción. Él declarará previsiblemente el jueves, tras los Mossos d'Esquadra que participaron en la investigación.

¿Quién es el acusado? ¿Qué se sabe de él?

Se llama Brian Raimundo y tiene 24 años, original de Bolivia. El hombre tiene antecentes por violar a su hermana de siete años y a una expareja. Por la violación de Igualada la Fiscalía pide 45 años de cárcel para él: quince por la agresión sexual y 30 por intento de asesinato, por los durísimos golpes que presuntamente le propinó, incluído en la cabeza, que le dejó un traumatismo craneoencefálico. Todo esto, tras atacarla por sorpresa y llevarla a una zona solitaria para agredirla sexualmente en la noche de Halloween de 2021. En palabras del abogado de la víctima, "la agresión sexual tiene un nivel vejatorio. La niña se encuentra muy mal, pero no recuerda la agresión sexual en sí, por el golpe que recibe en el lado izquierdo de la derecha. Por las características del ataque, hay que hablar de un monstruo".

¿Cómo dieron con el acusado los Mossos d'Esquadra?

Analizando todas las cámaras del polígono de Igualada. Vieron a Brian siguiendo a la víctima de madrugada. Las cámaras les llevaron hasta la casa del acusado. Allí encontraron la ropa de la noche del crimen con ADN de la víctima.

Un vecino de Igualada grabó a un grupo de jóvenes destrozando un coche y ese vídeo fue clave para encontrar al acusado. Se ve a Brian unos pocos segundos y esa imagen permitió a los investigadores reconstruir su recorrido. Recorrido de esa fatídica noche en la que dejó a la víctima semidesnuda, ensangrentada y temblando, tal y como ha explicado en el juicio el camionero que la encontró esa noche y que llamó al 112.

El estado en el que se encontraba la víctima era terrible. Pasó tres días en la UCI, un mes hospitalizada y se sometió a al menos cinco operaciones. Además del traumatismo craneoencefálico, perdió la audición en un oído.