La Bolsa, pendiente de las eléctricas, de la inflación de la zona euro, de la OPEP y de los índices PMI

La Bolsa abre con ligeras pérdidas. Muy ligeras. Los mercados tienen que digerir toda una batería de importantes indicadores económicos. El más relevante de todos, sin duda, es el IPC de la zona euro. También se conocerán a lo largo de la mañana cifras de paro en Alemania y en el conjunto la Unión Europea. El desempleo se encuentra actualmente en el Viejo Continente en el 8,1 por ciento.

En Alemania se esperan también las ventas al por menor. Además, los inversores tendrán que digerir los indicadores PMI de actividad manufacturera en toda Europa. Suelen dejarse notar en los mercados. Hoy volverán a la actividad las Bolsas de Estados Unidos, que ayer permanecieron cerradas por la festividad del Memorial Day. El mercado de futuros apunta hacia una apertura ligeramente alcista en Wall Street.

En el trasfondo de los mercados continúa el temor a un excesivo repunte de la inflación en las economías occidentales. El IPC de España se ha elevado hasta el 2,7 por ciento, medio punto por encima del dato de mes anterior. En Alemania la inflación se ha ido al 2,5 por ciento, frente al 2 por ciento contabilizado un mes antes. Hoy se conocerá el IPC del conjunto de la zona euro, que actualmente se encuentra en el 1,6 por ciento en tasa interanual. Se espera que repunte hasta el 1,9 por ciento. El Banco Central Europeo maneja un objetivo de inflación del 2 por ciento.

El índice Ibex 35 baja un 0,1 por ciento tras las primeras operaciones del día hasta 9.140 puntos. Viene de firmar su cuarto mes alcista consecutivo. La Bolsa ha ganado en mayo cerca de un 4 por ciento. Los analistas técnicos creen que, si no se complican las cosas, la subida puede prolongarse en el corto plazo hasta la zona de los 9.500 puntos. Las eléctricas cayeron ayer. Especialmente Endesa e Iberdrola. Hoy han abierto con muchas dudas. El Gobierno lleva hoy al consejo de ministros un anteproyecto de ley para frenar la excesiva retribución que reciben las nucleares y las hidráulicas. Y el sector ha torcido el gesto. No en vano una medida como ésta afectará directamente a las cuentas de resultados. Las empresas que generan electricidad por saltos de agua y las que lo hacen con sus centrales nucleares tienen costes más bajos que el resto, pero cobran la tarifa que marca la última tecnología que entra al sistema para cubrir la demanda. Las centrales de ciclo combinado, que queman gas para generar electricidad, producen a precios muy elevados porque se ha encarecido el gas natural. Al extenderse al resto encarece la factura del consumidor.

Una subida de los precios de la energía eléctrica junto con el repunte en el precio del petróleo y los carburantes le complicará la vida a las familias, a los teletrabajadores y a las pequeñas empresas. Además, al encarecer los costes, repercutirá en la competitividad de los bienes y servicios que produce España. Los analistas de Bankinter aconsejan apostar en este momento por empresas ligadas al ciclo económico, como industriales, banco, consumo, logística o turismo y no tanto por sectores habitualmente utilizados como refugio, como el eléctrico.

En los demás mercados, el petróleo supera ya los 70 dólares por barril. Hoy la OPEP y sus socios celebran una importante reunión. Se espera que ratifiquen el incremento de la producción previsto para el próximo. Se está recuperando a buen ritmo la demanda mundial de crudo, gracias a las vacunaciones y a la mejora de la actividad económica. El mundo financiero vuelve a mirar hoy hacia las criptomonedas, que están moviéndose entre constantes volteretas. La volatilidad es extrema. El Bitcoin se ha recuperado en las últimas horas, después de una rotunda caída en las sesiones anteriores. Esta mañana el Bitcoin rebota, sube un 5 por ciento. Se paga a 37.000 dólares.