La Bolsa ha sentido hoy en sus carnes los vértigos y las preocupaciones que no sufrió ayer

Los mercados contienen el aliento a la espera de conocer cuándo y cómo se produce la respuesta de Israel a los ataques que lanzó Irán el pasado sábado. Nadie olvida que Irán produce más de tres millones de barriles diarios de petróleo, ni que por el estrecho de Ormuz pasan cada día cerca de 21 millones de barriles de crudo. Con esta incertidumbre flotando en el ambiente, el índice Ibex 35 ha perdido un 1,5 por ciento, hasta 10.526 puntos. Han caído con fuerza las acciones de las empresas acereras, -Arcelor y Acerinox-, presionadas por las pobres cifras de producción industrial en China.

En el otro platillo de la balanza ha destacado la subida de Naturgy, la antigua Gas Natural. Criteria, -el brazo inversor de la Caixa y primer accionista de la compañía gasista-, negocia con un grupo de Emiratos Árabes para que compre el 40 por ciento del capital de Naturgy que actualmente se encuentra en manos de los fondos CVC y GIP.

Ha pesado hoy sobre el ánimo de los bolsistas el repunte en la rentabilidad de los bonos tanto en Europa como en Estados Unidos. Estos últimos rinden ya un 4,65 por ciento, que es su nivel más alto de los últimos cinco meses. Crecen las dudas sobre cuándo la Reserva Federal comenzará a bajar el precio del dinero. La solidez del mercado laboral, la pujanza del consumo privado y la fortaleza del mercado inmobiliario mantienen la presión sobre la inflación, por lo que la autoridad monetaria estadounidense no siente urgencia ni prisa alguna por comenzar a rebajar sus tipos de interés.

El Fondo Monetario Internacional ha aumentado una décima su previsión de crecimiento para la economía mundial precisamente por el vigor de la actividad en EEUU. A este lado del Atlántico, la presidenta del Banco Central Europeo, Christine Lagarde, ha apuntado en sentido contrario. Ha dejado claro que pronto comenzará el recorte de tipos salvo que se produzcan sorpresas.

El capítulo da datos macro ha sido intenso en el día de hoy. El índice ZEW de confianza inversora ha sorprendido agradablemente a los analistas. Ha crecido desde los 31,7 puntos de marzo a los 42,9 de abril. Este mismo indicador referido al conjunto de la zona euro ha pasado de 33,5 a 43,9 puntos. Son cifras más fuertes de las que esperaba el mercado. El superávit comercial de la zona euro ha aumentado en febrero hasta 23.600 millones de euros, frente a los 11.400 millones del mes anterior. El FMI ha mejorado cuatro décimas su estimación de crecimiento para la economía española en este año, hasta el 1,9 por ciento. Mantiene su previsión para 2025 en el 2,1 por ciento.

En el ámbito empresarial, hoy el Banco Sabadell ha descontado el dividendo de tres céntimos que abonará el jueves. En EEUU hoy han publicado resultados Morgan Stanley y Bank of America. Los del primero han superado las previsiones y han decepcionado los de este último.

El Tesoro ha colocado hoy letras a 3 y 9 meses. Ha ingresado 2.050 millones de euros. La demanda ha rozado los 5.500 millones. Ha bajado rentabilidad en ambos vencimientos. El rendimiento de los títulos a menor plazo ha pasado del 3,653 hasta el 3,632 por ciento. La rentabilidad del papel a 9 meses ha bajado del 3,578 al 3,519 por ciento. El Tesoro volverá al mercado pasado mañana. Venderá bonos y obligaciones con vencimientos a tres, seis y diez años, además de papel a muy largo plazo con una vida residual de 42 años y 3 meses. El objetivo es captar hasta 6.500 millones de euros.