TECNOLOGÍA SOSTENIBILIDAD
El sector empresarial español busca reducir su huella de carbono desde las materias primas
El sector empresarial de España, uno de los 15 países comunitarios que lograron disminuir sus emisiones y aumentar su PIB en 2023, mantiene su objetivo de minimizar su contaminación desde el inicio de la cadena de producción hasta el consumidor gracias a herramientas como la medición de la huella de carbono u otras basadas en la innovación y la tecnología.
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El sector empresarial de España, uno de los 15 países comunitarios que lograron disminuir sus emisiones y aumentar su PIB en 2023, mantiene su objetivo de minimizar su contaminación desde el inicio de la cadena de producción hasta el consumidor gracias a herramientas como la medición de la huella de carbono u otras basadas en la innovación y la tecnología.
Por ejemplo, en la industria alimentaria crecen las soluciones que rastrean los datos de carbono de alimentos y bebidas desde la granja hasta la tienda para añadirlos al etiquetado de los productos o, en este mismo ámbito, la iniciativa Ship2Fair, coordinado por la Fundación Circe desde España, que busca integrar la energía solar térmica en los procesos industriales del sector agroalimentario en Europa.
En el caso de la multinacional química BASF, su aplicación digital MyCarbonFootprint, que en estos momentos utilizan más de 50 empresas, según un informe de la propia compañía, logra medir y comparar la huella de carbono de los productos que ofertan basado en información sobre sostenibilidad de más de 700 productos.
La herramienta recoge los datos de ingredientes farmacéuticos, resinas amino, butanodiol y derivados o ácidos e informa a los clientes de sus parámetros de calidad y propiedades como el volumen de emisiones de CO2, la huella de carbono del producto o la proporción de materias primas renovables.
En este contexto, una investigación en la revista académica sobre producción sostenible Journal of Cleaner Production ha revelado que la presencia de una etiqueta de carbono aumenta la probabilidad de compra entre los consumidores europeos, los que están dispuestos a pagar hasta un sobreprecio de hasta el 20 % por un producto respetuoso por el clima.
El responsable de Marketing Estratégico Global de la División Operativa Intermediates y líder del desarrollo de la aplicación de BASF, Niels Möller, ha aludido al valor de la transparencia a la hora de ofrecer productos para lograr el posicionamiento de sostenibilidad deseado.
Así, la aplicación calcula la reducción potencial de las emisiones CO2 si elegimos una alternativa adecuada dentro de la cartera de BASF, por ejemplo, al escoger un producto BMB -productos de base biológica o biomasa balanceada-, menos contaminantes que aquellos con estándares fósiles.
Según los datos arrojados por Eurostat, España redujo en un 1,86 % la producción de gases de efecto invernadero a la par que aumentó su PIB en un 4,2 % en el primer trimestre de 2023.
Por otro lado, a nivel europeo, este 1 de octubre ha entrado vigor la fase inicial del Mecanismo de Ajuste en Frontera de Carbono (CBAM), la primera política del mundo para imponer aranceles a las emisiones de CO2, por el que las empresas extranjeras deberán informar de todas las emisiones de gases de efecto invernadero relacionadas con el proceso de producción de productos como el cemento, acero, hierro, aluminio, fertilizantes, combustible de hidrógeno y electricidad.
A partir de 2026, las importaciones que no cumplan los estándares de emisiones de los 27 deberán enfrentar un cargo adicional al cruzar la frontera.
Además, con el propósito de hacer compatible la creación química y la protección del medio ambiente, 300 pymes proveedoras de la multinacional alemana han concluido una formación en sostenibilidad dentro del programa de capacitación Proveedores sostenibles del Pacto Mundial de Naciones Unidas en España junto con la Fundación ICO y la entidad pública empresarial ICEX.