El etarra que ordenó el secuestro de Ortega Lara sufre un infarto a punto de ser trasladado a Logroño

Kantauri cumple una condena de 30 años por los delitos de asesinato, atentado, secuestro, depósito de armas, detención ilegal y falsificación

El etarra que ordenó el secuestro de Ortega Lara sufre un infarto a punto de ser trasladado a Logroño

Juan Baño

Publicado el - Actualizado

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Francisco Javier Arizcuren Ruiz, Kantauri, que fuera jefe de los pistoleros de ETA entre 1994 y 1999, una de las etapas más sanguinarias de la banda terrorista, se encuentra ingresado la UCI del hospital Virgen de la Arrixaca, en Murcia, tras sufrir ayer tarde un problema de corazón, al parecer un infarto, cuando se encontraba en practicando deporte en las instalaciones de la prisión de Campos de Río. Ocurrió a menos de 72 horas después de hacerse público el pasado jueves su traslado inmediato a la cárcel de Logroño, dentro de la nueva política de acercamiento de presos de ETA a prisiones más próximas al País Vasco del gobierno de Pedro Sánchez.

Instituciones Penitenciarias tenía previsto trasladar al histórico jefe de ETA a Logroño tras haber progresado a segundo grado (el régimen ordinario de cumplimiento) a propuesta de la Junta de Tratamiento de la prisión murciana.

Arixcuren Ruiz Kantauri, ya había tenido un episodio similar hace poco más de dos años en esa prisión murciana. El anuncio de su traslado ha levantado en las últimas horas un enorme rechazo entre los funcionarios de la prisión riojana. Entre los muchos atentados y secuestros que ordenó este criminal se encuentra el cautiverio más largo ejecutado jamás por la banda terrorista, el de José Antonio Ortega Lara, funcionario precisamente de la cárcel a la que va ahora destinado, la de Logroño. Pudo ver la luz después de 532 días gracias a una operación espectacular de la Guardia Civil. La imagen de Ortega Lara dio la vuelta al mundo como máximo exponente de la crueldad de la banda.

La asociación profesional de funcionarios de prisiones califica este traslado de “auténtica provocación” y de “una bajeza moral sin precedentes”. Lamenta que nadie haya tenido la sensibilidad necesaria para impedir esta coincidencia: “Aún es más duro asimilar el hecho de que uno de los máximos responsables de la secretaria general de instituciones penitenciarias que coparticipa en esta decisión, sea el que por aquel entonces era director de este centro”. Se refiere la Asociación Profesional de Funcionarios de Prisiones (APFP) a Eugenio Rivas. “Que poca memoria tienen algunos”, concluye el comunicado de la asociación.

Kantauri ingresó en prisión el 17 de diciembre de 2001 y cumple una condena de 30 años por los delitos de asesinato, atentado, secuestro, depósito de armas, detención ilegal y falsificación. Cumplirá las tres cuartas partes de la pena en junio de 2025.

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