La hemeroteca se vuelve de nuevo contra Iglesias y desata otra polémica por la vigilancia policial de su chalé

Roces, encontronazos, identificaciones y sanciones a los vecinos que se manifiestan diariamente, cacerola en mano, en las inmediaciones del chalé que la pareja formada por el vicepresidente del Gobierno y ministro de Derechos Sociales, Pablo Iglesias, y la ministra de Igualdad, Irene Montero, tienen en la sierra de Galapagar, para protestar por lo que consideran una nefasta gestión de la pandemia del coronavirus. Esa es la imagen diaria que se difunde además como la pólvora a través de redes sociales, quedando para más inri reflejado en numerosos vídeos que los propios vecinos graban.

Una imagen que, desde el ministerio del Interior se entiende que está causándole un desgaste excesivo, por lo que ha comenzado a mover ficha. Y es que son muchos los españoles que no entienden el exagerado despliegue de seguridad que hay en torno esta vivienda. Pero no sólo está erosionando la imagen del ministerio que dirige Fernando Grande-Marlaska, sino también la de los propietarios del lujoso chalé de casi 600.000 euros, Pablo Iglesias e Irene Montero, a los que acusan de estar sobreprotegidos.

Una de estas medidas para intentar limpiar la imagen tanto de la pareja como del ministerio del Interior, sería la sustitución de la Guardia Civil en las labores de vigilancia del chalé, que pasarían a manos de la Policía Nacional, con la posibilidad, incluso, de que hubiese agentes de paisano en la zona.

Una orden dada por Grande-Marlaska que desde el sindicato mayoritario de la Policía Naciona, Jupol, se ha denunciado públicamente calificándola de "ilegal", ya que "obliga" a ésta a realizar las funciones de vigilancia de dicho chalé que está ubicado en el municipio madrileño de Galapagar, una demarcación en la que tiene atribuidas las funciones de seguridad la Guardia Civil.

Por su parte, la Unión de Oficiales de la Guardia Civil, asociación profesional con representación en el Consejo de la Guardia Civil, se ha indicado que “el Ministerio del Interior debería explicar por qué se transfiere este servicio”.

Al mismo tiempo, esta asociación de Guardias Civiles ha aprovechado la ocasión para, tirando de hemeroteca, recordar unas palabras de Pablo Iglesias pronunciadas en 2012 y en las que cargaba duramente contra la Policía Nacional, llegando a asegurar que “La policía no protege a la gente, son matones al servicio de los ricos”.

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