Juicio del procés | Trapote sobre el 1-O: "Nunca llegó a mis manos el plan de actuación de los Mossos"
La decimotercera sesión del juicio ha arrancado con la testifical de los que fueran jefes de la Policía Nacional y la Guardia Civil en Cataluña el 1-O
Madrid - Publicado el - Actualizado
3 min lectura
El juicio por el 'procés' independentista que se celebra en el Tribunal Supremo se ha reanudado este jueves con la declaración del comisario Sebastián Trapote, que dirigía a la Policía Nacional en el operativo por el referéndum ilegal del 1 de octubre de 2017 en Cataluña.
Sebastián Trapote, ha denunciado la violencia ese día de algunos concentrados, que formaron "cadenas humanas" y agredieron a agentes para impedir su entrada a puntos de votación y aún eran más agresivos a su salida porque estaban "cabreados y enrabietados".
Trapote ha destacado que el 1-O, pese a que en algunos colegios había también niños y ancianos, los concentrados eran principalmente individuos con una "alta virulencia, perfectamente organizados" para intentar boicotear que la Policía cumpliera con la orden judicial de impedir el referéndum.
Según Trapote, que poco después del 1-O pasó a segunda actividad y ya no dirige a la Policía Nacional en Cataluña, los concentrados sabían cómo hacer resistencia, hacían llamamientos a través de las redes sociales para pedir apoyo, formaban cadenas humanas y agredían y empujaban a los policías intentando impedir "por todos los medios" que los agentes pudieran acceder a los puntos de votación para requisar urnas.
"Si era difícil entrar, a veces era peor salir, era más complicado porque, como consecuencia de haber hecho una intervención dentro del centro, los ciudadanos que estaban fuera estaban mucho más cabreados, estaban enrabietados, y las reacciones eran más violentas", ha descrito el mando de la Policía durante el 1-O.
Ante esta reacción violenta de los concentrados, las unidades policiales se tuvieron que emplear "de una manera no contundente, pero sí más fuerte que en la entrada, para poderse replegar", ya que no podían "consentir" que les rodearan, bloquearan y no les dejaran salir.
Según Trapote, la Policía tuvo incluso que desistir de intervenir en algunos puntos de votación del 1-O, como en un colegio del barrio de Horta de Barcelona, porque la "virulencia era tal" por parte de los concentrados que prefirieron no actuar "porque si no las consecuencias hubiesen sido graves tanto para los policías como para los ciudadanos", ya que había el "riesgo" de que se produjeran "daños personales y físicos" para todos ellos.
Momentos antes ha comparecido uno de los testigos inicialmente previstos para el próximo lunes, el que fuera administrador de la empresa Unipost -donde fue incautado material para el referéndum- Pablo Raventós, quien ha manifestado ante la sala su interés en no declarar en este procedimiento dada su condición de investigado en la causa que instruye el Juzgado de Instrucción número 13 de Barcelona, que investiga la organización de la consulta.
El presidente del tribunal, Manuel Marchena, ha contestado afirmativamente a su petición y tras ello este testigo ha abandonado la Sala.
A Trapote le seguirá su homólogo en la Guardia Civil, Ángel Gozalo Pascua y, para la sesión de la tarde, el tribunal ha citado al entonces jefe de la Comisaría General de Información de los Mossos d'Esquadra, Manuel Castellví y a Emilio Quevedo Malo, que era el máximo responsable de la Comisaría General Técnica de Planificación de la Seguridad de los Mossos.