Los coqueteos de Iceta con el independentismo: un país de naciones, referéndum e indultos
El nuevo ministro de Política Territorial nunca se ha ocultado de formar parte del sector más catalanista del PSC
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Miquel Iceta ha pasado hoy a presidir el Ministerio de Política Territorial y Función Pública, una cartera especialmente sensible a la cuestión territorial, en la que Iceta tiene unas convicciones muy claras y arraigadas.
De hecho, el nuevo ministro nunca se ha ocultado de formar parte del sector más catalanista del PSC. Esta carpeta, la del "procés", será una de las que le esperan ahora en el Ministerio de Política Territorial y Función Pública, donde tratará de dar prioridad al diálogo territorial desde una perspectiva federalista. De hecho, en el año 2019, Iceta aseguró que si algún día el 65 por ciento de los catalanes respaldan la independencia de Cataluña, la democracia tendría que encontrar "un mecanismo para hacerlo posible".
De hecho, tras aquellas palabras, el propio Iceta se vio obligado a publicar una serie de mensajes en su cuenta de Twitter para desactivar la polémica que se había generado entorno a aquellas declaraciones.
En sus mensajes, Iceta se definió como "federalista convencido" que defendía el "diálogo dentro de la ley" y "la España de todos". En este sentido, se muestra "contrario a la independencia" pero sí consideró que la solución "es un pacto de autogobierno" y convendría que los ciudadanos "pudiesen refrendar ese pacto".
Otras declaraciones polémicas del exlíder del PSC estaban relacionadas con una entrevista en la que aseguraba que España estaba conformada por ocho o nueve naciones, alegando que "las he contado". Y se refirió a País Vasco, Cataluña, Galicia, Aragón, Valencia, Baleares, Canarías y Andalucía, aunque también tuvo en cuenta el preámbulo del Estatuto de Navarra.
Referéndum e indultos
Iceta ha sido la cara del PSC durante los años del "procés", en los que ha buscado un difícil, a veces imposible, equilibrio entre la oposición a las iniciativas del Govern -las "leyes de desconexión", el referéndum del 1-O y la declaración unilateral de independencia- y la mano tendida a la "reconciliación".
Él fue el primero en hablar públicamente de eventuales indultos para los líderes independentistas; lo hizo cuando aún no estaban ni procesados, y eso le valió un aluvión de críticas.
Ya en 2013, Iceta participó en la redacción de la Declaración de Granada, que recoge la propuesta territorial del socialismo para España y defiende ampliar el autogobierno de las autonomías, si estas lo desean, para conseguir una gestión más eficaz.