El misterioso grupo al que se le atribuye el asalto a la embajada norcoreana suspende sus actividades

El mensaje llega un día después de que CCD se atribuyera el ataque sobre la legación en Madrid el pasado 22 de febrero

El misterioso grupo al que se le atribuye el asalto a la embajada norcoreana suspende sus actividades

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

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El misterioso grupo que se atribuye el ataque a la embajada norcoreana en Madrid anunció hoy que suspende "temporalmente" sus actividades y pidió a la prensa que deje de informar sobre la organización y sus miembros para no ponerles en riesgo.

"Se estaban preparando varias acciones contra el régimen norcoreano, pero debido a agresivos artículos especulativos en los medios, las actividades de las unidades operativas han sido suspendidas temporalmente", dijo Cheollima Civil Defense (CCD) en su página web.

El mensaje llega un día después de que CCD se atribuyera el ataque sobre la legación en Madrid el pasado 22 de febrero, en el cual el personal de la embajada fue maniatado y golpeado por un grupo de 10 hombres que robó después equipos informáticos antes de huir, según el auto judicial publicado por la Audiencia Nacional.

El documento judicial publicado el martes identifica a siete personas ligadas al ataque, incluidos el mexicano Adrian Hong Chang y el estadounidense Sam Ryu, para los que el juez encargado de la investigación ha solicitado su extradición a Estados Unidos, donde ambos se encuentran.

"Pedimos a los medios que coarten su interés en nuestra organización y sus miembros. Tenemos misiones aún más importantes de cara al futuro", se añade en el comunicado de CCD, que ahora se hace llamar Free Joseon (Corea libre).

La organización, que apareció en la red por primera vez en marzo de 2017, ha asegurado estar detrás del rescate de norcoreanos amenazados por el régimen y ha llegado a proclamar un gobierno en el exilio y a vender visados para entrar a Corea del Norte cuando "sea liberada". 

El auto apunta a que en el transcurso de esta operación -cuyo verdadero objetivo ni siquiera CCD ha dejado claro hasta ahora- el grupo habría incurrido en delitos de allanamiento de morada, detenciones ilegales, lesiones, falsificación documental, amenazas y robo, cometidos por organización criminal.

"Somos una organización de refugiados de Corea del Norte. Escapamos de Corea del Norte con la ayuda de la Corea libre del sur y nos hemos unido a nuestros compatriotas para formar este grupo", asevera CCD en el texto.

La investigación española ha establecido que las siete personas ligadas al asalto tienen pasaportes de México, EEUU y Corea del Sur y se sospecha que todos ellos son residentes en Estados Unidos. 

El comunicado de CCD se despide asegurando que son una "organización internacional unida por la idea de poner fin a la dinastía sucesoria de los Kim".

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