Pedro Sánchez se enfrenta a otro 12 de octubre difícil: ¿Volverá a hacer esperar a Felipe VI?

La negociación de una amnistía para los encausados del procés ha disparado la desafección contra Pedro Sánchez. Un enfado que, como en años anteriores, va a plasmarse a su llegada al desfile por la Fiesta Nacional. La Moncloa lo viene anticipando y el PSOE lleva semanas afrontando este 12 de octubre con un particular recelo, en el actual contexto político. De hecho, el Gobierno se blinda y ya ha colocado al PP la responsabilidad de los pitos e insultos contra el presidente del Gobierno en funciones.

Según marca el protocolo, Sánchez debe ser el penúltimo en llegar a la tribuna de autoridades y ser recibido por la ministra de Defensa, el jefe del Estado Mayor de la Defensa, la presidenta de la Comunidad de Madrid y el alcalde de la capital. Todos ellos deben esperar a los reyes y a la Princesa de Asturias, en el que será su primer acto público después de jurar bandera en la Academia General Militar de Zaragoza. El año pasado, sin embargo, Pedro Sánchez llegó tarde e hizo esperar a Felipe VI. Madrid vuelve a acoger este jueves el tradicional desfile del Día de la Fiesta Nacional que este año cambia de recorrido.

El desfile

4.177 hombres y mujeres de las Fuerzas Armadas marcharán por el Paseo del Prado y el de Recoletos, junto a 142 vehículos y 86 aeronaves que sobrevolarán los cielos de la capital. La marcha comenzará en el Paseo del Prado, a la altura de la entrada principal del Jardín Botánico, y finalizará su recorrido en la Plaza de Colón. El Ministerio de Defensa ha aclarado que el cambio de ubicación del desfile se debe a las obras del Paseo de la Castellana, desde la Plaza de Cuzco hasta Nuevos Ministerios, con motivo de la construcción del nuevo carril bici.

La instalación de isletas, semáforos y medianas en la calzada central de Castellana impiden que la marcha militar transcurra con normalidad, especialmente la de las unidades motorizadas, a pie y a caballo, que son el grueso del desfile terrestre. Los reyes llegarán alrededor de las 11:00 horas y serán recibidos con honores militares, tras lo cual don Felipe pasará revista al Batallón de Honores de la Guardia Real. Posteriormente, los monarcas saludarán a las autoridades, encabezadas por el presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, y la ministra de Defensa en funciones, Margarita Robles.

Las caras visibles

Todos los ministros asistirán al acto central, excepto la vicepresidenta primera y titular de Asuntos Económicos, Nadia Calviño, y la de Igualdad, Irene Montero, que se encuentran de viaje en Marruecos y Chile, respectivamente. También está previsto que acudan todos los presidentes autonómicos, salvo, como viene siendo habitual, el presidente de la Generalitat de Cataluña, Pere Aragonès, y el lehendakari vasco, Íñigo Urkullu, ambos de viaje oficial, el primero en Bolonia (Italia) y el segundo en Japón.

Formarán parte del mismo unidades terrestres y aéreas del Ejército de Tierra, Armada y Ejército del Aire, así como efectivos de Guardia Civil, Unidad Militar de Emergencias, Guardia Real, fuerzas y cuerpos de Seguridad del Estado y diversos organismos de Seguridad, Protección Civil y Emergencias. Una vez finalizado el desfile, los reyes Felipe y Letizia y la Princesa Leonor se trasladarán al Palacio Real para la tradicional recepción a las altas autoridades del Estado y a representantes del mundo político, económico, social y cultural.