La predicción de Rajoy sobre Iglesias y la cacerolada frente a su chalet de Galapagar

Pablo Iglesias es uno de los grandes nombres propios de la gestión de la crisis del coronavirus en España. Y no precisamente para bien. Si muchos ya recelaban del líder de Unidas Podemos recién estrenada su vicepresidencia del Gobierno, la animadversión ha ido mucho más allá en las últimas semanas. De hecho, tanto Iglesias como el presidente Pedro Sánchez son el foco de las protestas ciudadanas que ganan cada vez más presencia en Madrid. Y no sólo en la capital, ya que empiezan a extenderse a otros lugares de España.

La predicción de Mariano Rajoy sobre Pablo Iglesias

Son esas críticas repetidas sin cesar contra Iglesias (a quien algunos de los manifestantes de Núñez de Balboa ya apodan “Rasputín”, en honor al célebre monje ruso) las que han provocado que Twitter repesque un vídeo del pasado. Desde hace unas horas, varias cuentas de la red social de los 140 caracteres han contribuido a dar visibilidad a las imágenes.

Estas recogen un pleno celebrado hace varias legislaturas en el Congreso de los Diputados. Quien llevaba la voz cantante del discurso era el entonces presidente del Gobierno, Mariano Rajoy. En su alocución, el ex líder del Partido Popular dirigía unas palabras, como bien evidencia la cámara, a Pablo Iglesias.

“Oiga, a usted le votan estudiantes, abuelos, obreros, catedráticos, autónomos, comerciantes... ¡Y suman cinco millones (de votos)! Y es una cifra importante. Oye, y a los demás... ¿quiénes nos votan? ¿Los ricos o gente despistada?”, exponía Rajoy, con las risas notorias de parte del hemiciclo tras estas dos últimas preguntas.

“Ustedes hablan mucho de la gente. Pero conviene, de vez en cuando, además de hablar de la gente, hacerle caso a la gente. Porque es que hay gente para todos los gustos y gentes con gustos distintos. Por tanto, nadie tiene el patrimonio de la gente. Ni usted ni nosotros. Nosotros tenemos un poquito más. Por lo menos, en estas últimas semanas”, sentenciaba, entre aplausos, el líder del Ejecutivo.

Quién le iba a decir a Rajoy en aquella época que sus palabras reprobatorias contra Iglesias cobrarían tanto sentido tiempo después. Con toda una pandemia de por medio y algunos ciudadanos dispuestos incluso a protestar delante de la mismísima vivienda del vicepresidente segundo.

La cacerolada frente al chalé de Iglesias

Sí, el malestar de algunos vecinos de Galapagar les ha hecho protestar, cacerola en mano, en las afueras del chalé en el que habitan Iglesias y su pareja, la también ministra Irene Montero. No eran casos aislados, sino decenas de personas. Provistas, además, de la bandera de España.

El descontento por los efectos sanitarios y económicos del coronavirus en nuestro país se ha hecho notar y mucho. La permanencia de Madrid en la fase 0 de la desescalada tampoco ha contribuido a calmar a los más indignados. Y si Iglesias ya era un político con muchos detractores de por sí, la actual situación tan sólo ha empeorado las cosas.

Además, la casa frente a la que se manifestaron unos cuantos este sábado ha sido objeto de polémica desde que se supo de su existencia. Por la declaración no cumplida de Iglesias acerca de mantener su residencia, por mucho caché adquirido, en Vallecas. También por los lujos del domicilio e incluso por la seguridad del mismo, con la Guardia Civil a cargo de esta.

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Las precarias condiciones de los guardias civiles que vigilan el chalé de Iglesias en Galapagar

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A pesar de que la sede del PSOE en la calle madrileña de Ferraz tampoco se ha librado de recibir visitas contestatarias este fin de semana, Iglesias se lleva la palma en cuanto a hostilidad se refiere. Con aquella aseveración pasada de Rajoy sobre su discurso más de actualidad que nunca.