¿Rusia y Cataluña tienen una historia común? Pregúntenle Puigdemont
Carles Puigdemont apela a la historia común entre Rusia y Cataluña en su primera entrevista al país presidido por Vladimir Putin
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Carles Puigdemont, no encuentra barreras desde su casa de Waterloo (siempre y cuando no haya que viajar a España). En esta ocasión, su voz ha llegado a Rusia. La primera entrevista del expresidente de la Generalitat de Cataluña a un medio ruso ha sido al diario Komsomolskaya Pravda (fundado en 1925 como órgano oficial de las juventudes del Partido Comunista de la Unión Soviética).
Para Puigdemont, Rusia es “uno de los países más influyentes de la Tierra”, y por eso sostiene que "una Cataluña independiente mantendría relaciones cercanas y amistosas con ella”.
El expresident va más lejos e incluso habla de una historia común: "Somos dos naciones europeas con una historia común. ¿Sabes que uno de los más grandes comandantes navales del siglo XVIII, Josep de Ribas, era un catalán? Sirvió en el Mar Negro bajo el mando de la emperatriz Catalina la Grande (y fundó Odessa, cuya calle principal, Deribasovskaya, lleva su nombre). Lo mismo puede decirse de los cientos de huérfanos catalanes que encontraron refugio en Rusia después de la Guerra Civil Española a fines de la década de 1930...".
En otro momento de la entrevista, Puigdemont niega que detrás del 1-O estuviera “la mano del Kremlin”, como se ha señalado en medios occidentales, y afirma que no desea “perder el tiempo con estas barbaridades” porque, según él, se trata de “fake news”, informaciones falsas, sin pruebas, como lo demuestra, dice, un informe del Parlamento británico que desestimó la existencia de “una influencia secreta en la crisis catalana”
"Intransigencia española"
Puigdemont insiste en reclamar el referéndum: es la fórmula “civilizada” para que las naciones “determinen su futuro (...) Es la vía que quiere el 80% de los catalanes”. “Nunca rechazaremos el diálogo, la negociación y el referéndum como instrumentos para encontrar una solución política permanente a este conflicto”, frente a lo que califica de “intransigencia española”