Sigue la alerta y el frío y la nieve complican el regreso a la normalidad
Las temperaturas extremadamente bajas y las grandes nevadas de la borrasca Filomena convertidas en hielo complican el regreso a la normalidad en buena parte del país
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Las temperaturas extremadamente bajas y las grandes nevadas de la borrasca Filomena convertidas en hielo complican el regreso a la normalidad en buena parte del país, donde este martes se han reactivado gradualmente las principales vías de comunicación, mientras miles de estudiantes siguen sin clase y se intenta evitar la saturación de los servicios sanitarios.
"La alerta no ha terminado", ha insistido en rueda de prensa en la Moncloa tras el Consejo de Ministros el titular del Interior, Fernando Grande-Marlaska, quien ha hecho de nuevo un llamamiento a la precaución y la prudencia para evitar cualquier desplazamiento que no sea "estrictamente imprescindible", sea a pie o en vehículo.
Hasta el momento, son cinco las víctimas mortales consecuencia directa de Filomena (dos en Málaga, dos en Barcelona y una en Zarzalejo, en Madrid), pero los accidentes y lesiones se cuentan por miles, y la Guardia Civil ha realizado varios rescates de personas aisladas o perdidas en distintas comunidades autónomas.
Las urgencias hospitalarias de Madrid han atendido desde el lunes más de 2.000 pacientes con traumatismos y fracturas relacionadas con el hielo.
No lejos, en el Complejo Hospitalario de Toledo fueron atendidos el lunes 152 pacientes en urgencias por distintos traumatismos, 35 de ellos con fracturas quirúrgicas, mientras que desde los sindicatos se alerta de que el personal se encuentra exhausto y desbordado.
En otra de las provincias más afectadas por el temporal, Teruel, el Ayuntamiento de Alcañiz ha pedido no transitar por las calles para evitar que los accidentes en el hielo, sumados al significativo incremento de casos positivos de covid-19, colapsen los centros sanitarios.
Clases suspendidas
La Consejería de Educación de Castilla-La Mancha decidió este martes que las clases presenciales permanezcan suspendidas hasta el lunes 18 en toda la provincia de Toledo, excepto la zona de Talavera de la Reina y en la mayor parte de Guadalajara. Según su análisis, el impacto de Filomena ha sido muy diferente en las distintas zonas de la comunidad y el 70 % de los centros está "en condiciones" de abrir.
En la Comunidad de Madrid, donde ya ayer se anunció que las clases no se reanudarán en toda la semana, se han detectado 167 incidencias y desperfectos en centros educativos, aunque las autoridades educativas asumen que, "con toda probabilidad", la cifra aumentará según sigan las inspecciones.
Son en su mayoría daños por la acumulación de hielo y nieve en los tejados, riesgo de derrumbe en algunas infraestructuras, problemas en los sistemas de calefacciones, caídas de árboles y ramas y desprendimiento de canalones y pérgolas. Las clases han seguido suspendidas este martes en Aragón, donde se reanudarán mañana, y en una veintena de municipios de la Comunidad Valenciana y en 18 centros catalanes, la mayoría situados en la comarca del Priorat (Cataluña).
Reactivación gradual del transporte y los suministros
Más de 500 carreteras han seguido afectadas este martes por la nieve y el hielo, sobre todo en la red secundaria, con un centenar de vías cerradas y más de cien en las que era obligatorio el uso de cadenas. Ya no quedan sin embargo camiones embolsados. El aeropuerto de Madrid-Barajas, donde las operaciones quedaron suspendidas el fin de semana, desde ayer y hasta las 12.00 horas de este martes han operado más de 180 vuelos: más de 120 el lunes y más de 60 hoy, según fuentes de Aena.
Iberia ha informado de que este martes operará todos los vuelos de larga distancia inicialmente programados, aunque pueden sufrir retrasos dadas las condiciones climatológicas, y la mitad de los de corto y medio recorrido. En cuanto al tráfico ferroviario, la previsión de Renfe es operar este martes los servicios AVE en todas las líneas mientras trabaja para recuperar de forma paulatina las frecuencias programadas y las circulaciones de los trenes Alvia e Intercity en la práctica totalidad de los recorridos, excepto en las líneas Madrid-Extremadura y Madrid-Almería.
El hielo ha hecho mella no obstante en algunas vías, con retrasos en varias líneas y problemas a primera hora en la alta velocidad entre Zaragoza y Madrid y en el servicio de Cercanías de Madrid.
En la capital, aunque la Empresa Municipal de Transportes ha puesto ya en funcionamiento 244 autobuses urbanos, el metro, en funcionamiento las 24 horas, ha vuelto a ser el principal medio de transporte para miles de vecinos, con nuevas imágenes de vagones repletos.
Aunque miles de operarios municipales siguen afanándose en retirar la nieve y las placas de hielo de la capital, donde a mediodía se habían liberado de nieve y abierto al tráfico 1.005 kilómetros, los problemas para circular por muchas vías han dificultado el abastecimiento de algunas tiendas y supermercados.
Muchas han vuelto, sin embargo, a mostrar este martes sus estanterías llenas al normalizarse prácticamente la situación en Mercamadrid, que abastece a más de doce millones de personas.
Aunque el volumen de actividad ha sido menor que el de un martes normal, más de un millar de camiones han descargado en ese gran mercado 16 millones de kilos de alimentos.
Grande-Marlaska ha destacado que los cortes puntuales de suministro eléctrico registrados durante este temporal en Castilla-La Mancha, la Comunidad Valenciana y Jaén ya están subsanados, aunque siguen las incidencias en algunos pequeños municipios.
Telefónica también ha dado por resuelta la incidencia que dejó durante horas sin teléfono e internet desde el lunes a unos 37.000 clientes del noroeste de Madrid.
¿Zona catastrófica?
Ante el debate abierto por la posible declaración de Madrid como zona catastrófica tras la histórica nevada, el titular del Interior ha explicado que el Gobierno ha comenzado este martes a evaluar los daños provocados por la intensa nevada, aunque no procederá a repartir las ayudas a los afectados hasta que no concluya el temporal y se cuente con una valoración de los daños. Mientras, las autoridades madrileñas han reiterado su convencimiento de que en la capital se dan las condiciones para ser declarada zona catastrófica.
Según un primer balance, se calculan 10 millones en daños en edificios públicos, otros 5 millones en edificios privados y 5,6 millones en edificios en construcción, de acuerdo con los datos facilitados por la vicealcaldesa, Begoña Villacís.
Por su parte, el Gobierno de Castilla-La Mancha ha avanzado que abrirá un proceso para recabar información del mundo empresarial, sindicatos, tercer sector, ayuntamientos y diputaciones para evaluar daños y que, en función de los datos, se planteará o no la posibilidad de solicitar al Gobierno central la declaración de zona catastrófica.
La portavoz del Gobierno central, María Jesús Montero, ha pedido unidad a las fuerzas políticas y ha lamentado que "algunos" estén tratando de montar "polémicas políticas" y, a su juicio, estériles a causa del temporal. "La Comunidad de Madrid normalmente mira al Gobierno de España cuando no quiere dar explicaciones respecto a su propia gestión", ha lamentado.
No se han escuchado este martes críticas de boca del líder del PP, Pablo Casado, que ha acudido al centro de coordinación de emergencias de Madrid 112, y ha destacado el esfuerzo de todas las administraciones para coordinarse ante el temporal y en concreto el papel de Defensa.
Por su parte, el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha visitado en la base aérea de Torrejón, en Madrid, al primer batallón de la Unidad Militar de Emergencias (UME), donde ha subrayado que tanto la pandemia como Filomena han evidenciado la importancia de tener unos servicios públicos de primer nivel, potentes y fuertes.