La UE se abre a "intensificar" la negociación con Reino Unido para hablar de textos legales como exige Londres
Desde el Ejecutivo británico dejaron claro a Barnier que no tenía sentido viajar a Londres mientras no hubiera un cambio de posición sustancial del lado de los Veintisiete
Madrid - Publicado el - Actualizado
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El negociador de la Unión Europea para la relación con Reino Unido, Michel Barnier, ha trasladado este lunes a su contraparte británica, David Frost, la disposición de la UE a "intensificar" la negociación sobre la relación futura para dar el paso de discutir cómo trasladar a textos legales los puntos sobre los que ya hay acercamiento, tal y como exige Londres.
Barnier preveía viajar este mismo lunes a Londres para una nueva ronda de negociaciones, pero las tensiones entre el Gobierno de Boris Johnson y los líderes de la UE, exigiendo cada bando un cambio de posición al otro para desbloquear la situación, obligaron al negociador europeo a aplazar sus planes.
Desde el Ejecutivo británico dejaron claro a Barnier que no tenía sentido viajar a Londres mientras no hubiera un cambio de posición sustancial del lado de los Veintisiete, después del enfado de Johnson porque los jefes de Estado y de Gobierno de la UE pidieron un gesto a Londres y suprimieron de una declaración conjunta la palabra "intensificar" al referirse a los contactos de las próximas semanas.
Así las cosas, Barnier y Frost hablaron a primera hora del lunes para rebajar la tensión y buscar vías de acercamiento, lo que ha llevado al europeo a referirse expresamente a la disposición de los 27 a dar un impulso de las negociaciones "en Londres esta semana", con el fin de abordar todos los temas, "incluidos los textos legales".
El bloque comunitario se resistía hasta ahora a discutir sobre cómo trasladar a textos legales los elementos sobre los que ya hay un acercamiento suficiente para contemplar una cuerdo, porque era reticente a iniciar este trabajo hasta identificar puntos de consenso en los asuntos clave sobre los que aún hay fuertes diferencias.
El acceso a las aguas británicas por parte de la flota europea, la gobernanza que asegure el cumplimiento de los acuerdos y asegurar las mismas reglas de competencia a las empresas de ambos lados siguen siendo líneas rojas para la UE y sobre las que Reino Unido no quiere ceder soberanía.
Desde Downing Street, por su parte, han descrito la conversación entre Barnier y Frost como un contacto "constructivo", aunque insuficiente para reanudar las conversaciones "hasta que no haya un cambio fundamental en la estrategia de la UE". En cualquier caso, ha añadido el portavoz del Gobierno británico, las dos partes seguirán en contacto.