Acoso y violencia contra las mujeres sin velo en Irán: “Las pegan y las torturan con descargas eléctricas”

“Las autoridades iraníes han puesto en marcha una nueva campaña de violencia, la policía de la moral está de nuevo en las calles deteniendo a mujeres violentamente, metiendo con violencia a mujeres en las furgonetas policiales, pegando a mujeres, torturando a mujeres con descargas eléctricas”, cuenta a COPE Raha Bahreini, investigadora para Irán de Amnistía Internacional.

Dice que es “una campaña de intimidación contra las mujeres y las niñas para conseguir que se cumplan las leyes que obligan a llevar el velo” en Irán. “Las mujeres han continuado -miles de ellas en todo el país- quitándose el velo obligatorio y han demostrado que quieren que se respeten sus derechos humanos, pero las autoridades han tratado de forzar a las mujeres a llevar el hiyab por medio de medidas punitivas, con la confiscación de coches, negando a las mujeres acceso a servicios públicos y lugares públicos como aeropuertos, estaciones de metro, hospitales y bancos, y esto no ha sido suficiente para frenar la resistencia de las mujeres”, explica Bahreini. El régimen de Teherán “está intentando con todas las armas posibles suprimir este clima de resistencia y desafío contra su sistema”.

La investigadora de Amnistía Internacional asegura que “a lo largo de 2023, de acuerdo con datos oficiales, más de un millón de mujeres -en todo Irán- recibieron mensajes con la advertencia de que sus coches serían confiscados porque las habían visto en sus coches sin llevar el velo.

Hemos documentado los casos de muchas mujeres que han sido citadas por la fiscalía, amenazadas con recibir latigazos y con ser multadas. Y hemos documentado casos de mujeres artistas que han sido sometidas a castigos draconianos como limpiar edificios gubernamentales o a trabajar en depósitos de cadáveres para lavar cuerpos, o que han sido sancionadas con la asistencia a lo que llaman las autoridades 'sesiones terapéuticas psicológicas´ por desórdenes sociales. Ven la oposición a la obligatoriedad del velo como una enfermedad que debe ser curada”. Según Barhreini, “las mujeres y las niñas en Irán sufren una discriminación sistemática en el acceso a igualdad de derechos en el matrimonio, en el divorcio, custodia, herencias y acceso a cargos políticos.

La edad para responsabilidad penal en Irán para mujeres es 9 años y para los hombres es 15 años. La edad para casarse para las niñas es 13 años y niñas menores de 13 años también pueden ser obligadas a casarse”. Afirma que “las autoridades iraníes tratan a las mujeres y a las niñas como a ciudadanas de segunda clase. La obligatoriedad del velo también facilita un amplio espectro de violaciones de derechos humanos contra las mujeres, como negar el acceso a servicios públicos por negarse a llevar el velo, ser despedidas de puestos de trabajo o expulsadas de universidades o escuelas”.

Además de esta renovada campaña de violencia y acoso a las mujeres, en Irán “se han disparado horriblemente las ejecuciones en todo el país, las autoridades iraníes están utilizando la pena de muerte como instrumento para eliminar la disidencia”. Irán es el segundo país donde se llevan a cabo más ejecuciones, por detrás de China.

En 2023 fueron ejecutadas 853 personas. La mayoría de las ejecuciones se aplica a condenados por delitos relacionados con la droga, pero también a manifestantes, disidentes y usuarios de las redes sociales. La investigadora de Amnistía Internacional indica que “desde las protestas de 2022 han sido ejecutadas nueve personas en relación con esas protestas, hay otras siete personas condenadas a muerte en relación con las protestas y algunas de ellas podrían ser ejecutadas de manera inminente”. Añade que “los presos que están en el corredor de la muerte en Irán están tan desesperados que en los últimos meses han escrito cartas públicas desde la cárcel pidiendo a la gente de todo el mundo que intervenga y les apoye para parar estas ejecuciones”.