Borrell pide "más impacto" de las actividades de la Unión por el Mediterráneo

El Alto Representante de la Unión Europea para Asuntos Exteriores y Política de Seguridad y Vicepresidente de la Comisión Europea, Josep Borrell, ha pedido este jueves un esfuerzo a los Estados miembros de la Unión por el Mediterráneo (UpM) para que sus actividades tengan "más impacto".

Así lo ha afirmado en Barcelona, en la inauguración del séptimo Foro Regional de la UpM, en el que también participa el ministro de Asuntos Exteriores, Unión Europea y Cooperación español, José Manuel Albares.

Borrell ha destacado que, en los últimos tiempos, los gobiernos de esta organización euromediterránea -que reúne a los países de la Unión Europea y 15 países del sur y del este del Mediterráneo- han acordado, por ejemplo, "acciones conjuntas para una mejor integración" de los mercados de trabajo de la región.

También ha habido compromisos para "reforzar la cooperación científica" con el fin de atender las "prioridades del cambio climático y de las energías renovables", así como "compromisos para mejorar el acceso de las mujeres a la vida pública y los procesos de toma de decisiones, elevar la participación de las mujeres en la economía y combatir y prevenir la violencia contra las mujeres".

La UpM actúa "en muchas áreas", ha dicho Borrell, pero la gente, especialmente los jóvenes, "han oído muchos compromisos, están un poco cansados de oír compromisos", ya que lo que quieren es "ser escuchados" y poder "involucrarse en acciones concretas sobre el terreno".

"A menudo somos demasiado lentos", ha advertido Borrell, antes de añadir: "Necesitamos más impacto real en las actividades de la UpM sobre el terreno".

Borrell se ha mostrado convencido de que hay que "hacer más" y ha animado a los participantes en el Foro Regional, que se celebra en la Fundación Joan Miró de Barcelona a aprovechar esta cita para "desarrollar ideas concretas".

También ha señalado que la atención que presta la Unión Europea a la guerra en Ucrania no debe ir en detrimento de las relaciones con los países de la ribera sur del Mediterráneo, ya que hay que seguir "minimizando" las "consecuencias negativas" de este conflicto.

En la inauguración también han participado el ministro Albares, el ministro de Asuntos Exteriores de Jordania, Ayman Safadi, así como el secretario general de la UpM, Nasser Kamel.

En su intervención, Kamel ha destacado los esfuerzos de la UpM en abordar problemas como el desempleo, pese a contar con unos recursos "muy limitados" y pese a un contexto marcado por los efectos de la pandemia de la covid y una situación que aún se ha "deteriorado" más debido a la guerra en Ucrania.

Por su parte, Albares ha destacado el momento crucial en que se celebra este encuentro por la guerra "injusta" en Ucrania y los negativos efectos que está teniendo en la región, que sólo se podrán afrontar desde la cooperación y el diálogo.

"Hoy tenemos que comprometernos de verdad", ha añadido el ministro, quien ha pedido actuar desde el respeto a la Carta de las Naciones Unidas y bajo el esfuerzo conjunto.

Son tiempos de hablar de autonomía estratégica y de la relación entre la Unión Europea y el Mediterráneo, ha añadido Albares, para quien esta autonomía debe ser abierta.

Hay que ser conscientes además, ha dicho, de la interdependencia que tienen los países de la región respecto a sus vecinos más cercanos, y ha agregado que la Unión Europea no puede garantizar su autonomía si no lo hace sobre la base de reforzar su relación con sus vecinos.

Ha abogado por superar ciertos desequilibrios que se producen en las dos orillas del Mediterráneo, algo crucial en estos momentos, y hacerlo con la vista puesta en tres objetivos: más integración, mayor sostenibilidad y mayor cohesión.

Para el ministro, el contexto actual, de alta vulnerabilidad, obliga a reflexionar sobre las acciones que hay que desplegar para mejorar la resiliencia de la región, donde es de gran importancia dar prioridad a la juventud.

Ha anunciado además que la Agencia Española de Cooperación Internacional firmará un acuerdo con la Fundación Anna Lindh, a la que destinará medio millón de euros, para proyectos de inclusión social en la región euromediterránea.