España y Marruecos alcanzan nuevos compromisos en la gestión migratoria

El Gobierno de Pedro Sánchez admite la “responsabilidad compartida” en el control de los flujos migratorios y la gestión de una frontera común. Durante su visita relámpago en Rabat, el presidente del Gobierno tras reunirse con su homólogo, Sahedinne El Othamani, ha comentado la necesidad de operar en origen para poner coto a los flujos migratorios hacia el sur de Europa. “No es sólo una cuestión de seguridad, sino de cooperación y de diálogo con países emisores de migrantes. Tenemos que reforzar a nivel europeo toda la cooperación al desarrollo en esos países y, por supuesto, la lucha contra las mafias”, manifestó el jefe de Gobierno en su primer encuentro oficial en Marruecos, que vuelve a quedar marcada por la continuidad de las buenas relaciones bilaterales no sólo en materia de seguridad, también en el campo económico y cultural. 

Compromiso de reducir las llegadas de migrantes 
 

 “La relación está presidida por la cooperación”, remarcó Sánchez en todo momento, quien abordó en la audiencia con Othmani que ambos países deben comprometerse en la reducción, el próximo año, de las embarcaciones llegadas al sur de España que este verano alcanzó una cifra récord. Un total de 43.467 inmigrantes y refugiados han alcanzado las costas españolas en lo que va de 2018, lo que significa una media de 152 llegadas por día, según cifras oficiales actualizadas a fecha 15 de octubre. Así, este año registra el récord de llegadas, superando las cifras durante la 'crisis de los cayucos' de 2006, cuando 39.180 personas alcanzaron España por vía marítima, principalmente a través de las Islas Canarias. Los dos jefes de Gobierno han convenido “reforzar las políticas de retorno”, que recientemente habían sufrido una reducción por parte marroquí al bajar a sólo 10 número de emigrantes irregulares admitidos cada día tras ser expulsados de España, frente a los 25 de hasta hace poco. En el campo migratorio, Pedro Sánchez se refirió por último al compromiso de confrontar los desafíos de la desertificación en el África Occidental, en los que está envuelto Marruecos con el Rey, Mohamed VI, a la cabeza, porque los efectos del cambio climático se sitúan en el origen de la movilidad de migrantes dentro del continente africano y hacia Europa. 

Foro empresarial hispano-marroquí
 

La cooperación entre ambos países atañe igualmente al campo económico y empresarial, fundamental en las relaciones  bilaterales, teniendo en cuenta la notable presencia de inversos españoles en el país magrebí que están generando “riqueza, empleo y prosperidad”, manifestó Sánchez, razón de más para lanzar el primer foro hispano-marroquí “previsto para el próximo año”. El objetivo es seguir profundizando en las relaciones comerciales y de inversión.  En este mismo sentido, el presidente del Gobierno anunció el re-impulso del tercer cable para que conecte el mercado eléctrico marroquí con el mercado eléctrico español y adelantó la necesidad de relanzar las reuniones de Alto Nivel (RAN) para el próximo año. Por último, Pedro Sánchez informó de su presencia en la próxima cumbre internacional de Marraquech donde jefes de Estados de todo el mundo se sentarán para firmar un pacto mundial de las migraciones. “El Gobierno de España estará presente al más alto nivel porque consideramos que este país no sólo es amigo sino una responsabiliza compartida. Marruecos puede contar con España”.