"El sanchismo nos ha introducido que cumplir la ley puede ser una pérdida de tiempo"

Señoras y señores, me alegro, ¡buenos días!

Miércoles, 26 de marzo. Se va marzo, se ha ido la borrasca. Hoy es un día de tiempo estable. Hombre, queda alguna llovizna en el Cantábrico, tal vez en Baleares, en alguna zona de Canarias. Pero las temperaturas van tomando cuerpo de primavera. Y, hombre, sale el sol. Habrá alguna nube torpe, pero sale el sol, y a lo largo de estos próximos días, más todavía.

Bueno, vamos a ver. ¿Usted se ha planteado alguna vez…? Ahora le hablo de España, de los presupuestos, de la foto de Otegi, de Puigdemont y tal y cual, pero es que estamos hablando de… hacernos una pregunta como europeos. ¿Usted ha pensado cuánto tiempo podría aguantar en su casa sin pedir ayuda al exterior en caso de guerra o de desastre climático? Usted dirá: "Bueno, no, no, tengo un congelador lleno de comida". ¿Y si se va la luz? Bueno, pues me la voy haciendo poco a poco, la cocina. ¿Y qué tiene usted, vitrocerámica o fuego?

Porque si tiene vitrocerámica y se va la luz, tampoco es que con luz la vitrocerámica sirva de mucho. Eso es una mierda para cocinar, que nos sirve para calentar agua. Pero, bueno, tampoco puede cocinar, a no ser que haga una hoguera, rompa un sillón y haga una hoguera en el salón. Claro, ¿todo esto a qué viene? ¿Por qué me pregunta usted? Pues porque hoy la Unión Europea va a presentar su plan de preparación de la ciudadanía para que estemos listos en caso de guerra o de catástrofe.

Lo que nos va a pedir Bruselas es que seamos capaces de sobrevivir en nuestra propia casa, al menos 72 horas, sin esperar ayuda externa. Y a partir de ahí dicen que van a fichar a muchos asesores y que van a tratar de ver cómo pueden compartir más información con las agencias de inteligencia de los países miembros para proteger a los 450 millones de criaturas que vivimos en el viejo continente. Vamos a ver ese plan, que tiene su gracia.

Bueno, vamos a ver. Hoy es el día en el que Pedro Sánchez comparece en el Congreso para hablar del aumento del gasto en defensa, que no quiere llamarle rearme y que en realidad va a ser una enorme operación de maquillaje contable, como se hace con el CIS o con el paro, pero esta vez con el gasto militar. Claro, esta vez no es para tomar el pelo a los españoles, es para tomar el pelo a los europeos, y tampoco es que esto sea más complicado, porque la gente en Europa no está tanto tomando el aperitivo como aquí.

El Eurobarómetro que conocimos ayer dice que los españoles nos diferenciamos del resto de europeos por no dar la máxima importancia a la seguridad ahora. En estos momentos, Rusia nos pilla lejos. ¿Ahora, va a llegar hasta aquí Rusia? Bueno, pues a lo mejor no… A lo mejor… ¿Quién sabe? Aquí ha llegado con el juego sucio muchas veces, apoyando golpistas sin ir más lejos, como ocurrió con Puigdemont.

Pero, bueno, Sánchez hoy se enfrenta al reto de acudir al Congreso. Está viendo a ver si puede mover fondos no ejecutados de otras partidas, racaneando de aquí y sacando de allí, etcétera, etcétera. Y aprovechando que es un gobierno de gandules y de inútiles, que no se ha gastado lo que se tenían que gastar. Bueno, no ha sido capaz de sacarle partido a todo el dinero y gente que Europa le ha venido dando a este tipo y a su loro padre. Bueno, pero así ni siquiera llegaría al objetivo, ¿no? Ni siquiera así.

De momento, ayer tuvimos un anticipo de lo que va a ser el espectáculo de hablar y hablar sin decir nada, en lo que es una experta la portavoz del gobierno, Pilar Alegría.

No, no dice nada. ¿Qué ha dicho? Nada, como siempre.

El sanchismo nos ha introducido… Bueno, nos ha introducido bastantes cosas, pero un nuevo concepto democrático consistente en que cumplir la ley puede ser una pérdida de tiempo y que lo mejor es no cumplir la ley. Pero ¿qué va a ser eso? Hombre, cumplir la ley es obligatorio, y me dirá usted…

Sí, sí, sí. Para no hacernos perder el tiempo en el Congreso, voy a estar yo 38 años haciendo lo que vea oportuno. ¿No? A esa regla de tres, eso sería el aviso franco. Bueno, pero tuvo que convencer a esta fenómeno, Pilar Alegría, que ayer nos deleitó con otra comparecencia surrealista en la que vino a decir que cumplir con el precepto de presentar los presupuestos si no tienen apoyo es una tontería, por más que lo diga la Constitución.

Esto es, de verdad, lo de esta tipa es para que lo estudie la NASA. Ese nivel de desahogo, de desparpajo en la mentira, en la falta de vergüenza… También hay que tener un talento innato para hacer lo que hace y decirlo, como lo dice.

Artículo 134, Constitución Española. "El gobierno deberá presentar el proyecto de presupuestos". Es decir, "deber" es una obligación, no una opción. Otra cosa es que la Constitución, en la que no preveía que hubiera sujetos como Sánchez en circulación, no añadiera ninguna pena, ninguna, ningún tipo de multa política al gobierno que no lo haga. Pues el gobierno que no lo haga tiene que convocar elecciones por fuerza.

Pero bueno, Pilar Alegría no es la única que nos trata como si fuéramos idiotas. También está Félix Bolaños, "Gracita", que ayer quiso hacernos esta trampa dialéctica.

Lo que sucede es que, en ausencia de unos presupuestos generales aprobados para el ejercicio en curso, se prolongan los anteriores, y la Constitución lo regula con total normalidad.

No, tramposo, tramposo, tramposo. Eres un tramposo. Demasiado tramposo para ser ministro de Justicia, letrado mayor del reino.

La Constitución regula que se puedan prorrogar unos presupuestos si, una vez presentados, no tienen el apoyo parlamentario y no pueden ser aprobados. Pero presentarlos es una obligación constitucional. Te saltas ese paso, "Gracita", ese pequeño detalle, que no tiene sentido el ridículo. Como no lo tiene Pilar Alegría ni todos los ministros que durante meses pusieron el grito en el cielo denunciando que el PP no cumplía la Constitución al no renovar el Poder Judicial.

Pues ahí los tienes, estos son los que no cumplen la Constitución.

Por cierto, hay una foto por ahí maravillosa. Es una foto de Otegi y de Puigdemont en Waterloo. Los dos para salvar Europa. Ese es el retrato de España. Los que manejan a Pedro Sánchez: un prófugo y un terrorista condenado. Y Pedro Sánchez se deja humillar. Es una provocación tremenda esa fotografía.

"Estábamos analizando y debatiendo sobre el futuro de Europa". ¡Fíate! Haciéndose los estadistas de marca blanca. La política española genera más personajes histriónicos de los que somos capaces de metabolizar.