Un niño de tres años sobrevive solo en un bosque gracias a la ayuda de un oso

La historia de supervivencia del pequeño Casey Hathaway ha dejado asombrados a los norteamericanos

Un niño de tres años sobrevive solo en un bosque gracias a la ayuda de un oso

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

2 min lectura

Como Mowgli y Baloo en el Libro de la Selva, la historia del pequeño Casey Hathaway, de apenas 3 añitos, y un oso del condado de Craven, Carolina del Norte podría ser la historia de una amistad inusual.

Según explica la CNNel pequeño jugaba con dos niños de su familia en el patio trasero de la casa de su abuela. Los tres niños comenzaron a adentrarse en un bosque cercano, y cuando los adultos se percataron, les llamaron a gritos para que retornaran. Dos de ellos volvieron, pero Casey no.  La familia comenzó a buscar al pequeño y, cuando después de una hora vieron que no aparecía, decidieron llamar a la policía.

Cientos de personas se sumaron a la búsqueda para encontrar al pequeño Casey, que tuvo gran repercusión a nivel estatal.

El FBI, los NCIS e incluso el cuerpo de marines se sumaron a la búsqueda, para la que se desplegaron helicópteros y drones. Las condiciones climatológicas eran brutales, y cada minuto contaba. La primera noche, la temperatura descendió a 10ºC bajo cero y se temía por la vida de Casey. El niño no iba vestido adecuadamente para el frío que hacía, y en la zona había muchos pozos y charcas en las que el pequeño podía caer.

Tras tres días de búsqueda, los miembros del equipo de rescate comenzaban a desesperar, pero recibieron una pista inesperada. En una zona del bosque, alguien había oído a un niño gritando para llamar a su mamá. 

Los agentes se desplazaron a la zona y encontraron al pequeño Casey, con zarzas clavadas en su cuerpo, y desorientado. La declaración del niño dejó sorprendidos a los agentes. Según Casey, a lo largo de esos 3 días hizo un amigo, un oso que lo acompañó y lo mantuvo caliente durante esos tres días que pasó desorientado en el bosque.

Los osos negros son relativamente abundantes en esa zona de Norteamérica, y son unos de los miembros menos agresivos de su familia. Son uno de los animales más inteligentes y es muy raro que ataquen a los humanos. 

De momento, las autoridades no desmienten la versión del pequeño, que aún se encuentra recuperándose del trauma de su desaparición.

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