Reino Unido pide cooperación internacional para un acceso equitativo a las vacunas
En los últimos días Johnson ha mantenido conversaciones con el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y la canciller alemana, Angela Merkel
Madrid - Publicado el - Actualizado
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El primer ministro británico, Boris Johnson, pide cooperación internacional para garantizar que todos los países puedan acceder a vacunas contra el coronavirus, dijo este martes su secretaria de prensa, Allegra Stratton.
En una rueda de prensa virtual con periodistas extranjeros, Stratton afirmó que el jefe del Gobierno ve "el nacionalismo de vacunas" como una "fuerza destructiva" e insta a colaborar mediante mecanismos multilaterales para una distribución "equitativa" de los fármacos.
La portavoz recordó que el Reino Unido ha destinado ya 548 millones de libras (625 millones de euros) al programa COVAX de Naciones Unidas, "la mayor donación bilateral", y desea ayudar en la distribución este año de 1.300 millones de dosis a países en vías de desarrollo.
"Como las variantes del virus que hemos identificado en el Reino Unido, Suráfrica y Brasil demuestran, la solución a esta pandemia va a ser internacional", declaró Stratton, quien subrayó que el dirigente conservador cree que "el nacionalismo de vacunas pone vidas en riesgo".
"Por este motivo, el Reino Unido va a la cabeza en asegurar que haya un acceso equitativo a vacunas en todo el mundo", incidió.
Así, en los últimos días Johnson ha mantenido conversaciones con el presidente de Francia, Emmanuel Macron, y la canciller alemana, Angela Merkel, a fin de debatir "la cooperación global para distribuir vacunas", apuntó.
A nivel nacional, Johnson está "satisfecho" con la evolución del programa de vacunación en el Reino Unido, pero advierte de que la situación es aún "peligrosa", puesto que sigue alto el número de ingresos hospitalarios.
Para evitar la propagación del virus, y en especial de las variantes extranjeras más contagiosas, el Gobierno británico impuso hoy más restricciones a los viajes, con la exigencia de nuevos test y una pena de 10 años de cárcel para los pasajeros que mientan sobre los países visitados si éstos están en la "lista roja".
A partir del próximo lunes, los viajeros llegados de estos territorios de máximo riesgo deberán cumplir cuarentena en un hotel especialmente designado asumiendo los gastos, mientras que todos los visitantes, con independencia del origen, tendrán que aislarse en un domicilio declarado y hacerse varias pruebas diagnósticas antes y después de llegar al Reino Unido.