Supermercados de Europa comienzan a ofrecer dos artículos gratis a sus compradores y proponen que llegue a toda España

En un movimiento que podría marcar un antes y un después en la lucha contra la pobreza menstrual, varios supermercados europeos han comenzado a ofrecer compresas y tampones de forma gratuita en sus establecimientos. 

Esta iniciativa, que ya está en marcha en países como el Reino Unido, busca garantizar que estos productos básicos sean accesibles para todas las personas que los necesiten. Ahora, la pregunta que muchos se hacen es: ¿llegará esta medida a España?

¿Qué es la pobreza menstrual y por qué es un problema en España?

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La pobreza menstrual es una realidad que afecta a millones de personas en todo el mundo, incluyendo a España. Se refiere a la dificultad para acceder a productos de higiene menstrual debido a su coste, lo que puede llevar a situaciones de exclusión social, absentismo escolar y problemas de salud. Según datos de organizaciones sociales, una de cada cuatro mujeres en España ha tenido dificultades para comprar estos productos en algún momento de su vida.

En Cataluña, por ejemplo, ya se ha dado un paso importante en este sentido. Desde marzo de 2024, las farmacias de la región distribuyen de manera gratuita productos menstruales reutilizables gracias a un acuerdo entre la Conselleria de Igualdad y Feminismos de la Generalitat y el Consell de Col·legis Farmacèutics de Catalunya (CCFC). Esta medida ha sido especialmente beneficiosa para mujeres en situación de vulnerabilidad económica.

La iniciativa que ha surgido en reino unido

En países como el Reino Unido, cadenas de supermercados como Aldi han comenzado a ofrecer compresas y tampones de forma gratuita en los baños de sus tiendas. Esta iniciativa no solo busca combatir la pobreza menstrual, sino también normalizar el acceso a estos productos como un derecho básico. "El cuidado menstrual es un derecho humano básico", afirma Clara Amfo, embajadora de la organización benéfica Bloody Good Period, al medio Birmingham Live.

Además, estas cadenas han establecido colaboraciones con organizaciones benéficas para donar millones de productos menstruales a quienes más los necesitan. Este modelo, que combina la acción directa de las empresas con el apoyo de entidades sociales, podría ser un ejemplo a seguir para otros países, incluida España.

El Ministerio de Igualdad de España ya ha mostrado interés en extender la gratuidad de los productos menstruales a todo el país. Ana Redondo, ministra de Igualdad, ha señalado que están estudiando la posibilidad de implementar una medida similar a la de Cataluña. "Estuvimos en Barcelona, y nos explicaron que esta medida, especialmente para mujeres vulnerables y con escasos recursos, había dado sus frutos y estaba resultando positiva", ha afirmado.

¿Podría llegar esta medida a toda España?

Sin embargo, Redondo ha puntualizado que la materialización de esta iniciativa dependerá de "muchos elementos", como la prioridad política y la capacidad económica. Aun así, el hecho de que se esté considerando seriamente esta posibilidad es un avance significativo en la lucha contra la pobreza menstrual en España.

La gratuidad de los productos menstruales no solo beneficia a las personas en situación de vulnerabilidad, sino que también tiene un impacto positivo en la sociedad en general. Algunos de los beneficios más destacados son:

• Reducción del absentismo escolar: Muchas jóvenes faltan a clase durante su menstruación por no tener acceso a productos higiénicos. Esta medida podría ayudar a reducir este problema.
• Mejora de la salud: El uso de productos menstruales inadecuados o la falta de ellos puede llevar a infecciones y otros problemas de salud.
• Normalización del tema: Ofrecer estos productos de forma gratuita ayuda a normalizar la menstruación y a eliminar el estigma que aún la rodea.

La gratuidad de los productos menstruales no es solo una cuestión de higiene, sino también de dignidad y derechos humanos. Si esta medida llega a todo el país, podría marcar un antes y un después en la lucha contra la pobreza menstrual y en la promoción de la igualdad de género.