Paso en falso de Milei
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Madrid - Publicado el
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Hace unos días, el presidente de Argentina, Javier Milei, a través de su cuenta de X, promocionó la inversión de una criptomoneda que resultó ser un fraude. Los seguidores de Milei se lanzaron a invertir en tokens de ese activo lo que provocó que se disparara en la cotización para, una vez que se incrementó el valor, desplomarse por la decisión de unos pocos que se llevaron las ganancias. Una estrategia de enriquecimiento rápido que es una estafa. Lo grave de lo ocurrido es que quien promocionó la criptomoneda, con la buena intención de alentar el emprendimiento, fue el Presidente de Argentina, que horas después borró su mensaje en la red social.
Es innegable que Javier Milei centra la atención, y también la aversión, de no poca parte de la política del sur de América en la medida en que sus decisiones económicas, basadas en un liberalismo exacerbado, están sirviendo de contraste a las políticas estatalistas de los países limítrofes, en particular de los que pertenecen al Foro de Sao Paolo. Pero una cosa es alentar políticas económicas que favorezcan la inversión, alienten la libertad del mercado y la generación de riqueza y otra poner el crédito de un jefe de Estado al servicio de quienes montan chiringuitos financieros, dañando la imagen de Argentina. La responsabilidad que se deriva de su cargo debiera limitar determinadas sobreactuaciones de un presidente que ha enarbolado la lucha contra la casta política pero que revela, en episodios como este, las debilidades de su liderazgo.