Economía y Personas

Cáritas española acaba de publicar su Informe Economía y Personas. La labor de esta institución de la Iglesia católica no necesita presentación. «Por sus frutos les conoceréis», y los de Cáritas son de sobra conocidos. Hay algo, sin embargo, que sí requiere un poco más de atención. La promoción humana no es solo acción, también es análisis y juicio. Y en eso Caritas está siendo también pionera.Su último Informe no es solo un estado de la cuestión. Es también una propuesta razonada y razonable, en diálogo con las ciencias sociales y desde la Doctrina Social de la Iglesia. Caritas se atreve a cuestionar a quienes sostienen que no hay más economía que la que parte del interés por obtener el máximo beneficio, dispuesto a aprovecharse de los bienes comunes, e incapaz de gratuidad. Hay que volver a decir que la economía es la gestión de recursos escasos orientados a satisfacer necesidades humanas. Por decirlo, una parte de la ciencia económica ridiculiza al Magisterio social de la Iglesia. Cáritas no ha dejado de recordar que el trabajo no puede ser una variable dependiente del capital y que un crecimiento económico que no sirve al hombre no es verdadero desarrollo. Las cifras lo confirman. Quizás vaya siendo hora de tomárselo en serio.