La presencia pública de la Iglesia

El secretario general de la Conferencia Episcopal, José María Gil Tamayo, ha participado en el Foro COPE Aragón, en Zaragoza, con una ponencia sobre la presencia pública de la Iglesia en la sociedad española. Gil Tamayo se ha referido a la vocación de la Iglesia en una sociedad plural y cambiante, y a las contribuciones más significativas que presta al bien común de la sociedad española. El secretario general y portavoz de la Conferencia Episcopal ha insistido en que la Iglesia no es un contrincante político, aunque a algunos les gustaría que lo fuera. En un momento histórico en el que se ha reducido el espacio público de debate, y en el que la política lo ha invadido todo como fórmula mágica, ha recordado que hay esferas que pertenecen a otros órdenes de la vida personal y social.Por todo esto, la pretensión de recluir a la Iglesia en las sacristías y en el fuero interno de las personas, excluyéndola del ámbito público, es inaceptable desde el punto de vista legal pero también desde el interés de la sociedad. La Iglesia es un ámbito de libertad y de verdad en el que deben sentirse acogidos quienes contribuyen al respecto de la dignidad humana, en particular de los más desfavorecidos, los descartados de nuestra época. La Iglesia vive para anunciar el Evangelio de Jesús, a través del testimonio personal y comunitario, dando vida a instituciones de caridad y educativas, de atención social a los marginados, y de generación de cultura. Una Iglesia que es mano tendida a una humanidad necesitada de la alegría y de la esperanza.