Estos consejos te pueden ayudar a prevenir y tratar el síndrome del túnel carpiano
En el día a día estamos constantemente utilizando las manos, pero si sentimos debilidad o torpeza, lo más probable es que padezcamos el síndrome del túnel carpiano
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Si bien es cierto que no todas las profesiones requieren del mismo esfuerzo, en función de cómo hagamos nuestro trabajo, podemos desarrollar unas dolencias u otras. No experimentará la misma sobrecarga una persona que trabaje en el campo que una que lo haga en una oficina.
No tener cuidado en nuestro día a día puede llevarnos a experimentar problemas como el síndrome del túnel carpiano. Este se basa en una presión excesiva en el nervio mediano en la muñeca. Es fundamental para que haya sensibilidad y movimiento en determinadas partes de la mano.
Cuáles son las causas
Lo primero que hay que entender es que el nervio pasa a través del túnel carpiano, que está compuesto por un ligamento grueso justo bajo la piel y sobre este nervio mediano. De esta manera, hay personas que tienen el problema del síndrome porque nacieron con el túnel demasiado pequeño o porque, al inflamarse, hace presión sobre el nervio.
En nuestra actividad diaria, aquellas acciones en las que tenemos que hacer el mismo movimiento de mano y muñeca una y otra vez también puede causar inflamación. Aunque no se haya demostrado que escribir en el teclado o usar el ratón, pero sí que pueden causar hinchazón de los tendones y puede terminar estrechando el túnel carpiano.
Además, el uso de herramientas manuales que vibran pueden llevar a este síndrome. Hay otros factores que influyen como el alcoholismo, infecciones, fracturas de huesos, obesidad o líquidos adicionales retenidos durante el embarazo o la menopausia.
De hecho, este síndrome es más común en mujeres que en los hombres y, con frecuencia, en personas de 30 a 60 años, cuando el cuerpo se resiente más.
Cómo sé si padezco el síndrome del túnel carpiano
Los principales síntomas incluyen:
- Torpeza cuando queremos agarrar objetos con la mano.
- Sentir la palma de la mano, el pulgar o varios dedos entumecidos o con hormigueo.
- Dolor en la mano, en la muñeca o en la zona que se extiende hasta el codo.
- Problemas a la hora de hacer determinados movimientos o coordinar los dedos.
- Complicación para cargar bolsas o agarrarlas de manera débil.
Qué puedo hacer para tratarlo
Si queremos prevenirlo mientras estamos trabajando en una oficina, lo mejor que podemos hacer es utilizar ayudas ergonómicas como almohadillas o teclados separados con el objetivo de que la posición y postura de la muñeca cuando escribamos sean las mejores posibles.
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Además, es muy recomendable tomar descansos frecuentes y, si en algún momento sentimos algún tipo de dolor o sensación extraña, lo mejor es parar para evitar que el problema se desarrolle.
Una vez que notemos que podemos estar padeciendo este síndrome, lo indicado es solicitar una cita a un profesional médico que nos pueda recomendar un tratamiento. Existe una cirugía que corta el ligamento que ejerce la presión y suele ser muy efectiva, aunque también podemos tomar otras medidas para no tener que entrar en el quirófano.
Algunas acciones las podemos tomar mientras dormimos, como evitar apoyarnos sobre nuestras muñecas o utilizar una férula. En caso de que no funcione, la férula la podríamos utilizar también durante el día, además de usar compresas frías o calientes en las muñecas donde nos duela.
También hay medicamentos que se pueden utilizar para aliviar los síntomas. Estos son los antiinflamatorios no esteroides, como el ibuprofeno o el naproxeno. Por otra parte, las inyecciones de corticosteroides pueden hacer bajar la hinchazón.