La alimentación en plena pandemia: así ha cambiado la covid-19 nuestra dieta

Distintos estudios corroboran que hasta el 80% de los europeos estarían dispuestos a pagar más por productos locales o artesanales. O que el 62% admite consumir más fruta y verdura. Natalia Ramos, nutricionista, nos ha contado a COPE que 'aunque ahora mismo el consumidor está volviendo a la normalidad, seguimos haciendo compras más grandes para ir menos al supermercado'. La llegada del otoño y la incertidumbre que pesa sobre nuestra salud han cambiado nuestro interés por lo que consumimos. 'Vamos buscando más productos de temporada, más legumbres, más platos de cuchara, más frutos secos que no solo tienen que ver con nuestras preferencias alimentarias sino con los nutrientes que nos aportan. Buscamos reforzar nuestro sistema inmunitario, disminuir el cansancio y la fatiga aunque lo ideal es una dieta variada y mediterránea con todos los grupos de alimentos'.

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La alimentación en la era COVID

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Como experta en alimentación, Natalia ve a los españoles 'cada vez más preocupados por dietas con un impacto positivo en la salud. A una alimentación más saludable. El propio consumidor admite que ya está cuidando más, que compra más saludable, que cocina más en casa. Es una tendencia que ha venido para quedarse. Ciertas rutinas que ha cogido durante este periodo de confinamiento que hemos tenido lo va a seguir manteniendo'. En este punto esta nutricionista sí nos resalta un aspecto importante. 'Los alimentos no nos van a ayudar a prevenir o a curar enfermedades pero sí es verdad que esos nutrientes que nos aportan nos ayudan a estar más protegidos. El consumidor ya lo tiene en la mente, es consciente de ello y lo está aplicando'.

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Entonces... ¿qué incluimos en estos próximos meses en nuestra dieta? 'Con ingredientes naturales, de temporada, de proximidad... son tendencias cada vez más patentes. Las legumbres que estábamos dejándolas de consumir ahora vienen en otros formatos. Por ejemplo, consumimos más hummus. Cereales integrales algo positivo por el aporte de fibra que tienen, la quinoa, frutos secos y la estrella es la proteína de origen animal -pescados, carnes, huevos- así como el aceite de oliva extra'.

Los consumidores así lo corroboran a preguntas de COPE. 'Consumo más fruta, más verdura. Cocino más. Procuro también hacer más ejercicio'. Otros aseguran 'tirar' de la dieta mediterránea. 'Bastante equilibrada. Fruta y verdura es bastante habitual y después carne y pescado. Quizás hago algo menos de ejercicio y comemos más en casa'.