Catequesis en tiempos de coronavirus con un títere, un párroco y a través YouTube
La iniciativa nace en la Parroquia Hermano San Rafael de Burgos
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Mayo es el mes por excelencia de las primeras comuniones. Una celebración que une a miles de familias cada año en España y ahora va a tener que posponerse a consecuencia de la crisis sanitaria provocada por el COVID-19. La lógica invita a pensar que con esta suspensión también desaparecen momentáneamente las catequesis previas que reciben los niños. Esa es la realidad para la mayoría pero no para la parroquia Hermano San Rafael de Burgos. Desde allí, a través de YouTube, siguen ofreciendo la posibilidad de seguir aprendiendo de una forma muy particular.
Álvaro Tajadura es un joven sacerdote al que su afición por algo tan clásico como los títeres le ha llevado a lanzar esta idea tan original: “Utilizo un muñeco que se llama Martín. Es un como el niño que acude a catequesis con el párroco Emilio. Con sus salidas de tono y respuestas graciosas animamos la catequesis”, explica a COPE. Una especie de clase individual que retransmiten cada miércoles en su canal oficial.
Está siendo todo una experiencia que afrontan con ilusión y como si se tratara de un reto: “Tenemos que adaptar los contenidos a un lenguaje adaptados a los niños y, además, al hacerlo a través de la pantalla, tiene que ser más visual de lo habitual”, asegura Álvaro. Le preguntamos por cómo preparar el personaje, cuál es su método y nos desvela una de las claves: “A veces pensamos que los niños son un público fácil y yo creo que no, son muy exigentes”, advierte. Por eso tiene claro que todos los contenidos se tienen que adaptar, lógicamente, pero sin perder el significado: “Hay que buscar el modo de transmitir una idea, dos como mucho, pero de una forma muy clara”.
Lo que más les reconforta son los comentarios de las familias que les siguen: “Están muy contentos”, reconoce. Y sí, son familias y no sólo los niños como era anteriormente. Seguramente sea una de las consecuencias positivas del trabajo que realizan: “Muchas se juntan para ver la catequesis en la tablet o incluso en la televisión”, nos cuenta Álvaro. Esos agradecimientos son sin duda un premio a una idea original en tiempos de coronavirus.