Baltasar Garzón arremete contra Vox y les acusa de hacer "muy poco por la democracia": "Fue terrible"
El exmagistrado de la Audiencia Nacional ha acudido a 'La Hora de La 1' para analizar junto a Mónica López toda la actualidad informativa
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Este martes, Baltasar Garzón, exmagistrado de la Audiencia Nacional, ha acudido a 'La Hora de La 1' para analizar junto a Mónica López toda la actualidad informativa, haciendo hincapié en la decisión del Tribunal Supremo de repetir el juicio a Arnaldo Otegi, el polémico chat de los militares y en la figura del Rey Emérito.
En primer lugar, el juez se ha mostrado en desacuerdo con la decisión que tomó el Tribunal Supremo de repetir el juicio de Otegi por el caso Bateragune, ya que cree que "tenía que haberse planteado otra solución": "El hecho de sufrir un nuevo procesamiento de juicio oral ya es en sí una condena", ha agregado.
"La decisión del Supremo no es de recibo. No creo en la repetición del juicio... es tremendo", ha sentenciado en el espacio de La 1, dado que considera que, en vez de la anulación del juicio "por la apariencia de falta de imparcialidad", se deberían haber decatntado por "una indemnización".
Asimismo, también ha opinado que Otegi no debería abandonar porque "no hay ningún obstáculo para que participe en política": "Si debe o no hacerlo es algo personal. No tiene por qué dar un paso atrás". "Lo que Otegi hizo por la paz me parece digno de reconocer pero ha tenido actitudes que no casan con eso", ha añadido.
"Bildu cumple la ley. Si no la estuviera cumpliendo, no estaría en el Parlamento. Cuestionar a Bildu porque su ideología es una que no se comparte me parece antidemocrático. Nos podrán gustar o no gustar, pero cumplen le legalidad constitucional y la legalidad democrática, por lo tanto, es un partido con el mismo derecho que el resto", ha declarado.
El ataque a Vox
A raíz de esto, Garzón ha asegurado que "hay otros partidos que, no teniendo esta cuestión pendiente en Tribunales, hacen muy poco por la democracia", ha asegurado, dejando a Mónica López muy intrigada. "¿A qué partidos?", se ha interesado la presentadora del espacio.
"Vox, sin lugar a dudas. No me ofrece la menor duda, no tenemos nada más que ver la trayectoria de este partido y la última escenificación de una moción de censura que fue terrible. No creo que se contribuyera al fortalecimiento de la democracia sino es para rechazar esas actitudes", ha señalado, dejando claro que "es demócrata" y, aunque "no le guste", se debe aceptar a todo tipo de partidos.
Por otro lado, también se ha mojado acerca de la polémica del rey emérito y ha declarado que la investigación sobre Juan Carlos I "debe agilizarse al máximo" y ser "profunda y rápida" para acabar con la "desconfianza" que se ha generado entre los ciudadanos.
Además, ante la cuestión sobre si estos hechos forman parte de la esfera privada del ex monarca, el ex magistrado no se ha mostrado del todo de acuerdo: "¿Hasta qué punto dispone de su privacidad cuando es compartida y financiada por el Estado? En todo lo que comporta el ejercicio de la Jefatura del Estado, es muy difícil hablar de privacidad ¿Cómo podemos discernir cuáles eran sus actos privados cuando ejercía?".
"Mea culpa" por lo sucedido con el rey emérito
"No soy monárquico, pero respeto la monarquía parlamentaria. Como es hereditaria y no se puede elegir, debe ser impecable en las finanzas". Haciendo hincapié en este mismo tema, la colaboradora le ha preguntado si cree que los poderes del Estado deberían reconocer un "mea culpa" por lo sucedido con el emérito.
"De alguna forma sí. Yo reconozco que, durante mucho tiempo, no se tomaron las medidas en este tema y no tanto en la figura del Jefe del Estado sino en lo que es los límites de la función: como se tienen que desarrollar, cuales son esos controles, cual es la necesidad de transparencia, etc. Sin perturbar las funciones de la monarquía, porque aquí estamos hablando de presuntos hechos delictivos, que es lo que la justicia suiza comenzó a investigar", ha reconocido.
"Y, de alguna manera, en los últimos treinta años, la justicia suiza nos ha marcado un poco la pauta a seguir en casi todos los casos de corrupción. Es verdad que la cuentas se abren en Suiza, pero me acuerdo de que nos marcaban la pauta antes de que aquí se produjera. De modo que sí, creo que hay un mea culpa, una reflexión que hacer sobre este tema, sin ir más allá ni buscar más culpables y de que no hemos hecho las cosas bien", ha concluido el entrevistado.