La increíble excusa del dueño de una discoteca donde se montó una fiesta ilegal: "Me llamó el niño y..."
El propietario del local defendía que no sabía nada de lo que estaba sucediendo en su negocio
Madrid - Publicado el - Actualizado
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Por desgracia, es bastante frecuente leer noticias en relación a fiestas ilegales en plena pandemia. Una de ellas se producía (supuestamente) en la sala Cibeles de Madrid.
Santiago Sanguina es propietario del local y así defendía que no sabía nada de lo que estaba sucediendo en su negocio. Se escudó por un 'descuido' al marcharse antes de la cuenta de la sala: "Fue por fallo mío, me fui a casa un momento, me llamó el niño y cuando viene me encontré que habían 20 personas más de la debida. La Policía me dice que este local nunca ha dado problemas", decía.
El vídeo suma 7.100 reproducciones. Asimismo, el tweet ha sido compartido 32 veces y 71 personas le han dado 'like'.
Los tuiteros no daban crédito a la excusa. "Una parodia no supera esto", "Le ha faltado el ¡no, hija,no!" o "Lo llamó su hijo porque el perro se había comido sus deberes, seguro", eran algunos de los mensajes de los usuarios que se tomaban con cierta ironía las declaraciones de este propietario que no entendían su explicación.
Almeida arremetió contra la "pandilla" de irresponsables que acude a fiestas ilegales
El alcalde de la capital, José Luis Martínez-Almeida, arremetía hace unos días este viernes contra "la pandilla" de "irresponsables" que organiza y acude a fiestas ilegales, a quienes ha recomendado pasearse por los hospitales y tanatorios de la ciudad y "poner en una balanza su frivolidad y sus ganas de fiesta" con el "drama y el dolor" que está provocando la pandemia.
En la presentación del proyecto de digitalización para el alumnado 'Brecha Digital', Almeida ha cargado duramente contra aquellos que participan y organizan fiestas ilegales, tras la publicación de un vídeo en redes sociales de una fiesta en la discoteca Teatro Barceló, donde se puede ver a la gente bailando sin mascarilla y sin respetar las distancias de seguridad.
A su juicio, esa "irresponsabilidad" e "insolidaridad" se curaría si visitaran los hospitales y tanatorios de la ciudad "pensando que puede ser sus padres, sus abuelos, sus tíos, sus hermanos e incluso sus hijos".