CIUDAD REAL

Triunfa la terna y cae herido de gravedad el subalterno Tornay en Tomelloso

López Simón, David de Miranda y Antonio Linares se repartieron siete orejas mientras el subalterno Francisco José Tornay fuer herido en el muslo izquierdo.

Alberto López Simón con las dos orejas cortadas este domingo en Tomelloso

Sixto Naranjo Sanchidrian

Publicado el - Actualizado

2 min lectura

Alberto López Simón lidió en primer lugar un animal bajo de raza que siempre tendió a quedarse corto. El madrileño firmó una faena larga e insustancial que se desarrolló en la distancia corta. Tampoco estuvo acertado con los aceros y fue silenciado.

Mejoró la imagen de López Simón con el manso cuarto que puso en más de un apuro a su cuadrilla en el tercio de banderillas. El toro sacó complicaciones que fue limando el torero del barrio madrileño de Barajas a base de firmeza. El final en las cercanía terminó de exprimir al animal antes de una estocada entera tendida. Las dos orejas fueron pedidas y concedidas.

El primero del lote de David de Miranda fue un astado del hierro de Santa Ana que se dejó sin mucho celo en toros los tercios. El onubense dejó una faena de largo metraje en el que mostró su concepto vertical, corriendo la mano con prestancia por el pitón izquierdo. No importo una estocada suelta y tres descabellos para pasear una amable oreja.

Otra más paseó del desfondado quinto, que hirió de gravedad al subalterno Francisco José Tornay, que perdió pie él solo al ir hacia un burladero y fue corneado en el muslo izquierdo al quedar con las piernas por fuera de las tablas. El toro llegó sin resuello al último tercio y De Miranda amarró el trofeo tras un buen volapié, lo mejor de su actuación.

Antonio Linares sorteo como primero de su lote un animal que salió sin celo de la suerte de varas pero que tuvo cierta movilidad en el tercio de muleta. El torero local puso ganas y disposición en una faena que remató de una estocada que hizo guardia y tuvo que ser refrendada con un golpe de descabello. La oreja recompensó el esfuerzo.

La lidia del sexto se eternizó en los primeros tercios. Como la faena de Linares, que puso más voluntad que oficio en un trasteo de muchos tiempos muertos que se entendieron poco pese al apoyo de sus paisanos. Las dos orejas que paseó finalmente tuvieron sabor local.

Tomelloso (Ciudad Real), domingo 30 de mayo de 2021. Media plaza sobre el aforo permitido.

Toros de Virgen María y Santa Ana (2º y 6º), bien presentados. Conjunto manso, descastado y deslucido.

López Simón, silencio y dos orejas.

David de Miranda, oreja tras aviso y oreja.

Antonio Linares, oreja y dos orejas tras aviso.

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