Cuidado con el "maskné" que puede arruinar la piel de tu cara

A las 11.02 minutos del lunes 21 comenzará el invierno. Con su entrada bajarán las temperaturas que traen consigo problemas para nuestra piel

Mascarilla más acné de invierno dan como resultado el "maskné"

Redacción digital

Madrid - Publicado el - Actualizado

4 min lectura

"Sé que piensan que mi piel es perfecta, pero no, tengo maskné", esta es la confesión que ha hecho a su más de 1.300.000 seguidores Michelle Sallas hija de Luis Miguel e influencer. Michelle luce una piel maravillosa en todas las fotos de sube a su feed, que comparte en su galería, sin embargo parece que está teniendo problemas con granitos que le salen en la barbilla, por encima del labio superior y en las mejillas por culpa del uso de la mascarilla. A Este problema, que se agrava con las bajas temperaturas del invierno -que está a punto de comenzar- se le conoce como maskne o maskné (o también mascarilla más acné de invierno).

Ver esta publicación en Instagram Una publicación compartida de ᴍɪᴄʜᴇʟʟᴇ sᴀʟᴀs �� (@michellesalasb)

"Maskné" la conjunción de la mascarilla y el acné

La unión de la palabra mascarilla en inglés -mask- y acné ha dado lugar a un nuevo vocablo, maskné, cuya definición sería acné provocado por la mascarilla, a la que nos hemos tenido que acostrumbrar para evitar contagiarnos del SARS-CoV-2, el virus que ha ocasionado la pandemia de la covid-19.

La mascarilla, nadie lo pone en duda, nos protege, pero también nos ocasiona, en algunos momentos, alguna que otra molestia. Uno de esos problemas son los que nos afectan a la piel por el uso prolongado al obstruir los poros. Oclusión que se une a la humedad que se genera entre la mascarilla y el vaho que sale de nuestra boca, más ahora en invierno por el contraste de temperaturas, y que favorece la inflamación. La obstrucción de los poros hace que surja el acné, especialmente en las mejillas y el mentón, pero también nos pueden aparecer los feos granitos alrededor de los labios.

ctv-7rg-shutterstock 1869464509

Fundamental para evitar esos granitos es mantener la piel muy bien hidratada (tanto por crema como por beber suficiente agua o líquidos). Una buena hidratación no solo nos va a proteger de esos antiestéticos granitos sino de otros efectos que también produce la mascarilla si la llevamos durante muchas horas, como les ocurre a los sanitarios. No olvidamos las quemaduras que sufrieron en la cara durante la primera ola de la pandemia por ese motivo.

Si somos propensos a que nos salgan granitos, lo mejor sería usar una crema específica que no solo nos aporte agua sino también evite el brote de sebo. Cremas con niacinamida que aporta un efecto antiinflamatorio y calmante, la piroctona olamina y glicacil que evita la proliferación bacteriana, o que contenga procerad que evita las irritaciones y las marcas del acné junto con zinc que es astringente y regula la producción de sebo.

¿Cómo luchar contra el acné de invierno?

Sin duda una buena alimentación con verduras, legumbres y frutas es bueno para mantener perfectamente engranado nuestro cuerpo por dentro y por fuera. La salud de nuestra piel también depende de la alimentación adecuada y de que nos olvidemos de los alimentos procesados, excesivas grasas y el abuso de los dulces que favorecen la aparición de sebo en la piel.

La buena hidratación también evita esa sequedad del ambiente durante el invierno por las calefacciones. Si notamos el ambiente muy seco podemos aplicarnos una bruma hidratante para humedecer el rostro.

La piel de la cara debemos limpiarla, al menos dos veces al día (una por la mañana y otra, fundamental, antes de ir a la cama), con un jabón suave y un tónico facial o agua micelar que calme y mantenga a raya las imperfecciones. Lo mejor es que esos productos no tengan fragancias muy fuertes o que limpien en exceso ya que podemos conseguir un efecto adverso al que buscamos, más sequedad e incluso irritación.

El maquillaje puede obstruir más los poros, un efecto que se agrava con la obligatoriedad de llevar la mascarilla. Por eso, los dermatólogos aconsejan o no usar maquillaje, o utilizar uno que sea libre de aceites.

El estrés que libera la hormona del cortisol es un enemigo de la piel. La ansiedad es el origen de algunos tipos de acné y si no controlamos ese estrés será muy difícil librarnos de él.

ctv-xgn-shutterstock 1867050127

Cambiar la mascarilla a diario o lavarla

En el mercado podemos encontrar muchas y diferentes tipos de mascarillas homologadas. Lo más correcto si tenemos acné y utilizamos mascarillas quirúrgicas es renovarlas cuando hayan pasado las horas de uso recomendado. Si utilizamos mascarillas lavables es importante lavarlas cada día. También podemos buscar aquella que mejor se adapta a nuestra forma de la cara y nuestras circunstancias.

Si vemos que el problema de nuestra piel es más grave de controlar que con estos consejos, lo mejor es acudir al dermatólogo para que nos dé la solución apropiada.

Temas relacionados