La Liga Femenina ofrece a las árbitras 3.300 euros por partido; ellas piden los 21.000 euros de los de Primera

Este sábado debía empezar la Primera División Femenina, denominada a partir de esta temporada como Liga F. Sin embargo, no lo ha hecho ya que las árbitras están de huelga y solicitan que a ellas también se les profesionalice como se ha hecho con las futbolistas.

Beatriz Álvarez Mesa, presidenta de la Liga de Fútbol Femenino, ha pasado por Tiempo de Juego para explicar la situación que vive el campeonato y por qué las colegiadas no se han presentado a los dos encuentros previstos para este sábado (Alhama-Madrid CFF y Atlético-Real Sociedad) que no se han disputado.

"Se le pidió al CSD que mediara para que las competiciones pudieran jugarse con normalidad. Llevamos semanas trabajando para que todo estuviera listo. Un proyecto de país que hoy más que apuesta por el fútbol femenino ha sido una vergüenza. Tenemos mucha tristeza, frustración y enfado. Por un lado, con una institución que ha intentado boicotear desde el minuto 0 que es la RFEF, pero también con el CSD que tenía que haber parado esto", se quejaba Beatriz Álvarez Mesa.

Sueldos de las árbitras

La pasada temporada las colegiadas recibían 300 euros (la principal) y 160 euros (las líneas) por un partido de la Primera Iberdrola. Es decír, el trío arbitral se llevaba 620 euros. Ahora, se le propuso a la RFEF que el recibo árbitral que abonan los clubes, que es de 3.300 euros por partido, fuera íntegro para las trencillas en el porcentaje que se considerara oportuno.

Antes de esos 3.300 euros, 620 euros iban para las colegiadas y el resto se lo llevaba la RFEF en concepto de desplazamientos, formación... Se propuso el pago de ese dinero íntegro para equilibrar los salarios de las árbitras con el de las jugadoras y con los ingresos comerciales por patrocinios que ahora tiene el campeonato.

La Liga Femenina ofreció a la RFEF poder negociar los otros conceptos de forma independiente al margen de estos 3.300 euros. La RFEF partía de 21.000 euros porque quería equiparar los salarios con los de los que pitan en LaLiga Santander. Desde LaLiga consideran que estás mejoran deben ser graduales y con lo que ingresan no pueden pagar esos sueldos. Por ello, las colegiadas han acudido a la huelga, aunque la mayoría de esos 21.000 euros ni siquiera fuera a ir para ellas y una ingente cantidad se la fuera a quedar la RFEF.