¿Estás más perdido que el 'barco del arroz'? Conoce el origen de la expresión

Las playas de Sanlúcar de Barrameda, Chipiona o la del Parque Nacional de Doñana tienen en el horizonte, a la vista de quien guste de fijar la mirada en su inmóvil presencia desde hace décadas, una embarcación embarrancada, rota y oxidada que llama la atención de quien, curioso, pregunta. "Es el barco del arroz", dicen los lugareños añadiendo la cantinela de ese dicho popular que lo pondría de ejemplo de ese estado generalizado seguramente por puro despiste: "Estás más perdido que el barco del arroz".

¿Existió esa embarcación? ¿Qué pasó con ella para que su historia devenga en paradigma de la desaparición de algo o de alguien, aunque sea metafóricamente y sólo hable del despiste del señalado con el dicho? No hay uno sino varios barcos a los que se relaciona con la frase en cuestión. Una de las cosas más curiosas reside en que, pese a la solera que se advierte en el dicho, las embarcaciones que son relacionadas con ello se enmarcan, casi todas, en la segunda mitad del siglo XX.

ANTE LA DESEMBOCADURA DEL GUADALQUIVIR

De hecho, el 27 de febrero de 1994, un barco chipriota cargado con 6.080 toneladas de arroz procedente de Bangkok, el 'Weisshorn', iba a penetrar en el río Guadalquivir con destino al puerto de Sevilla. A la altura de Chipiona, debido a la marea baja, el barco quedó encallado en la plataforma continental, provocando vías de agua. El arroz se infló con el agua de mar hasta el punto de abollar las puertas metálicas que lo guardaban. Ése es el que puede apreciarse en la distancia desde Sanlúcar, Chipiona o Doñana.

Acabó partiéndose en dos y la tripulación huyó del barco hacia las costas de Chipiona. Se dice que fue el capitán el que lo acercó a propósito a la costa, por una deuda con el armador. Otra versión más oficial apunta a que el barco se encontraba fondeado frente a la costa a la espera de entrar por el río. Pero ese día hubo un fuerte temporal que rompió la cadena del ancla. El barco se vio arrastrado por el viento y el oleaje hasta una zona poco profunda conocida como Bajo Picacho. Y ahí sigue, míralo en la foto, frente a esas playas gaditanas.

EL 'DELFÍN' Y EL 'ALCATRAZ'

En enero de 1937, en plena Guerra Civil Española, Málaga sufriría asedio por parte del bando sublevado. El gobierno fletó el 'Delfín' cargado de alimentos, un 'barco del arroz', tal como eran denominados popularmente aunque en su carga no llevara este cereal. Éste concretamente llevaba harina, aceite y bacalao, pero embarrancó cerca de la playa, la tripulación pudo salvarse pero no la carga. Se perdió todo produciéndose, además, un vertido de combustible que dio nombre a la playa de Calaceite frente a la que se hundió. Muchos submarinistas fueron, con el tiempo, a visitarlo.

El 'Alcatraz', por su parte, fue un barco argentino enviado en la década de 1940 por el gobierno de Perón a la España de la posguerra. Iba cargado de arroz, según informó el gobierno del país de procedencia, pero nunca llegó a las costas andaluzas. La versión más extendida del extravío es el hundimiento del barco, que daría origen a la locución. Se especula también que la tripulación del barco se hubiera quedado con éste y su contenido. Otras versiones relatan que la tripulación sufrió una enfermedad contagiosa y todos murieron, sin posibilidad de que el cargamento llegara a puerto.

Otras teorías del dicho popular refieren el barco de vapor que, en los años 50 del pasado siglo y cargado de arroz, se soltó de sus amarras cuando estaba amarrado en el Muelle de Cádiz, fue arrastrado por la corriente y se abrió soltando todo su cargamento que sería salvado con grúas. O ese otro que, en la década de 1980, había de llevar arroz de las Marismas del Guadalquivir tras una colecta realizada en Sevilla. Tenía que ser enviado a Etiopía. Pero nunco hubo noticias de la llegada al país africano, ni de su regreso. Otro de aquellos hechos que popularizó aún más el dicho.

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