Se acabó la fiesta para los hippies acampados ilegalmente en Benaocaz

Se acabó la fiesta para la Familia Arcos Iris. Ha hecho falta más de un centenar de guardias civiles pero la comuna hippie que ocupó una finca de Benaocaz instados a ello, según parece, por el ciclo lunar ha sido ya desalojada. En pleno Parque Natural Sierra de Grazalema, a unos tres kilómetros del pueblo, ha asistido desde mediados de mayo a las actividades de un centenar de personas y muchos enseres.

Operación pacífica la de este desalojo que ha impedido que los hippies completaran el pretendido ciclo lunar, que concluye el 16 de junio, pero que ha dejado más tranquilo al propietario de la finca. Por lo que se refiere a los vecinos de Benaocaz parece que han convivido de modo tranquilo con los participantes en esta concentración que, por otra parte, se llevan sanciones por hacer fogatas y acampar.

ORDEN DEL JUZGADO DE INSTRUCCIÓN DE UBRIQUE

El dispositivo se ha puesto en marcha tras obtener una orden dictada por el Juzgado de Instrucción de Ubrique. La intención era que, a lo largo del día, el asentamiento fuera desmantelado completamente y la zona quede libre de nuevo, aunque estas mismas fuentes han advertido que el proceso puede ser "largo" ya que "hay más de un centenar de personas y muchos enseres".

En el dispositivo han participado agentes de diversas especialidades de la Guardia Civil, como Seguridad Ciudadana, GRS, del equipo Pegaso con un dron y también del servicio Cinológico, entre otros.

INCUMPLIDO EL OBJETIVO DE LA COMUNA

Cabe recordar que el pasado mes de mayo, coincidiendo con el inicio del ciclo lunar que finaliza el 16 de junio, medio centenar de personas acamparon de manera ilegal en la zona subida a Fardela, en el término municipal de Benaocaz y enmarcado dentro del Parque Natural de la Sierra de Grazalema.

Una vez se supo de su establecimiento en esos terrenos, la Guardia Civil montó un dispositivo para evitar el acceso a la zona y que acudieran más personas para unirse a esta comuna. Como medida de persuasión, se han interpuesto numerosas sanciones por hacer fogatas y acampar, y se han ido desmontando las estructuras que montaban para evitar que se sintieran "cómodos".

Durante estas más de dos semanas, integrantes de la comuna hippie y vecinos de Benaocaz han convivido de manera tranquila, aunque con la presencia constante de la Guarcia Civil, ante un asentamiento pretendía mantener su presencia en esta zona hasta el 16 de junio, coincidiendo con el fin del ciclo lunar.

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